Jimena Bañuelos (@14ximenabs)
Con los pelos de punta tienen que estar en el Villarreal al ver la reacción de su afición. Quedan dos partidos de Liga y son dos finales para el conjunto castellonense. El ascenso a primera está muy cerca y sus hinchas quieren estar con ellos. De hecho, de las nueve mil setecientas localidades que el FC Barcelona puso a disposición del Villarreal, ya no hay ninguna disponible. Las entradas se han agotado en cuarenta y ocho horas. La marea amarilla inundará el Mini Estadi el próximo domingo.
Más de ciento setenta autobuses partirán de la ciudad castellonense con rumbo a la Ciudad Condal. En ellos irán unos hinchas cargados de energía para dejarse la voz y el alma animando a sus colores. Quieren triunfar en el Mini Estadio. Seguro que los jugadores se dejan la piel en el campo. No pueden decepcionar a una afición que está muy volcada con el equipo. El Submarino Amarillo depende de sí mismo para volver a la primera división. Ha demostrado ser un equipo con una fuerza y una calidad digna de los mejores. Por eso, que tiemble Barcelona que el Submarino va a torpedear por los tres puntos. Y lo que el Submarino se propone, el Submarino lo consigue.
El presidente del Villarreal, Fernando Roig, ha reconocido que es “espectacular” la reacción de su afición. Ha dado las gracias a todos por el esfuerzo y sin duda, “es una demostración de que el equipo está creciendo mucho y que ahora están más unidos que nunca.” Pues juntos, desde las gradas y desde el terreno de juego tienen un sueño que cumplir. Así que a demostrar que la unión hace la fuerza…Que la ansiedad por celebrar el ascenso ya no se puede controlar…