La serie se decidió en el último segundo por un tiro que tocó 5 veces el aro… sobran más descripciones. Por el camino los Sixers sufrieron la baja forma de un lastrado Embiid y la defensa de un muro llamado Marc Gasol. Renunciaron a él como arma ofensiva y le centraron en anular al que puede ser mejor 5 puro del mundo, al que terminó haciendo llorar de frustración, no fue un duelo justo. Su aportación bajó en 10 puntos y 5 rebotes, y los Raptors están en la siguiente ronda…además, han descubierto un arma nueva en el quinteto con Ibaka y Gasol juntos. Jimmy Butler terminó la serie con 22,0 puntos 6,9 rebotes y 5,6 asistencias siendo todo lo que necesitaron los Sixers, pero cuando se echaron sobre sus hombros y redujeron los finales de partido a un duelo entre Butler y Leonard, pese al buen rendimiento del de Philly, salieron perdiendo. 34,7 puntos 9,9 rebotes y 4,0 asistencias para Leonard, que si no llega a coger la mala racha final en el triple, nos habría dejado sin palabras a su altura. Ya domina hasta la suerte…
Toronto (3) 101-112 (3) Philadelphia
Los Raptors viajaron por última vez a Philadelphia quizá creyendo que podían cerrar la serie, pero los Sixers se encargaron de que eso no estuviese ni cerca de ocurrir. Mandaron en el partido durante todo el encuentro, y sólo el parcial del último cuarto hizo que la diferencia final no fuese más abultada. Los Raptors mostraron lo de siempre con Siakam y Leonard, sobre todo el segundo, pero cedieron claramente los rebotes, no acertaron los tiros exteriores, no rentabilizaron su mejor control del balón y en definitiva…. no detuvieron a los Sixers. El juego en transición de Philadelphia funcionó, Simmons fue decisivo e influyente, siempre positivo, y Embiid demostró que con él sano, la serie sería muy diferente. Jimmy Butler y sus 25 puntos, 6 rebotes y 8 asistencias, se encargaron del resto.
El dato: Embiid no está sano, y sus números lo muestran, pero con él en cancha en 36 minutos, los Sixers ganaron por 40 puntos.
La clave: Los Raptors fallaban los triples, y los Sixers cogían rebotes a sus propios fallos. Mucho más urgente el partido para Philadelphia, y se notó.
MVP. Ben Simmons. 9 de 13 en tiros para 21 puntos con 8 rebotes, 6 asistencias y ni una sola pérdida. No ha sido su serie, pero este sí fue su partido.
Philadelphia (3) 90-92 (4) Toronto
En los últimos 18 minutos de partido ninguno de los dos equipos dominó por más de 5 puntos, intercambiando además liderazgos con frecuencia cardíaca. El partido fue muy complicado para ambos equipos, y no podemos decir que ningún jugador brillase en su rendimiento, aunque muchos lo hicieron en su esfuerzo, y uno lo terminaría haciendo en su definición. Pocos puntos, pocas canasta tras asistencia, mucha tensión y momentos para todos los jugadores. Embiid en su línea, desacertado y agotado, pero determinante, en 45 minutos en pista los Sixers ganaban por 10, en los 3 que descansó, Toronto se las arregló para dar la vuelta al partido. Los Raptors tatuaron a Marc Gasol sobre Embiid para secar al africano, y éste terminó con 6 de 18 en tiros, en ataque se encomendaron a Leonard que lanzó 39 veces a canasta con relativo acierto…cuando parecía que Toronto decidía el encuentro de su lado, aparecía Jimmy Butler para igualar, pero Leonard tendría la última palabra.
El dato: 8 jugadores en la rotación de Philadelphia si contamos los 2 minutos de Monroe, 7 en la de Toronto….sin bromas.
La clave: Si no llega a parecer Ibaka, la serie podría haber cambiado de signo. 17 puntos, 8 rebotes (4 de ataque claves) y 3 asistencias. Se invirtieron las tornas del partido anterior en el rebote, y al final Toronto aprovechó sus oportunidades.
MVP. Kawhi Leonard. 41 puntos, 8 rebotes 3 asistencias y 3 robos. Nadie se acordará de que falló 23 tiros, porque metió el decisivo. Se ha echado al equipo a la espalda y ha hecho de los Raptors un candidato al anillo.