Anoche los Celtics tiñeron de verde las gradas, y la serie. Sólo existió un equipo sobre el parquet. Todo un golpe de moral, por la manera en la que se consiguió la victoria, y por lo que representa ésta. Ganar el quinto partido es normalmente garantía de ganar la serie.
Si hubo un hombre que representase lo que hizo todo el equipo, fue Avery Bradley, el héroe de la noche, que hizo una primera parte de récord. Pero más tarde le seguirían otros, como un Horford que sólo falló un tiro y se hizo fundamental en la circulación de balón.
No será una serie fácil en ningún partido, y lo que va a presentar Washington en casa en el próximo será muy diferente, se espera a unos Wizards heridos y agresivos. Pero hoy Boston ha alcanzado ese nivel que te hace pensar que hay un equipo que ha tomado realmente el mando de la serie.
Avery Bradley com sua melhor atuação em uma partida de #NBAPlayoffs! O ala-amardor marcou 29 pts, pegou 6 rebs e deu 3 assists! pic.twitter.com/qmtrAiXroD
— NBA Brasil (@NBABrasil) May 11, 2017
Washington Wizards 101-125 Boston Celtics
(2-3)
Ni un sólo respiro en todo el encuentro. Los Celtics impusieron un ritmo de juego que rozó el exceso, aupados a los hombros de un público que hizo reverdecer viejos laureles. La pura esencia de los Celtics ha ido aflorando partido a partido, y desde el dolor y el desconcierto más profundo, ha surgido el equipo que hizo soñar a muchos en esta regular season. la primera parte fue un recital en toda regla de Avery Bradley, si el resto de sus compañeros jugaron realmente bien, sobre todo en defensa, y bastante inspirados en ataque, los de Bradley no tuvo nombre. 10 de 13 en tiros, y 25 puntos, tope personal en play offs, ya en la primera parte. Tampoco es que el tercer cuarto fuese especialmente bueno para Wizards o malo para Celtics, pero quizá fuera el más abierto de todos, como lo refleja el marcador. Pero ni siquiera ese parcial se llevaría Washington. Wall encontraba un poco de aro en una noche pésima, en la que se le negó el camino del aro. Cada buena jugada de los Wizards, normalmente de la mano de Wall, Porter o Beal, era respondida inmediatamente por otra de Boston, generalmente desde la línea. En la segunda parte, Bradley dejó un hueco en la anotación que llenaron Horford (19 puntos con un sólo fallo, 6 rebotes y 7 asistencias), Crowder (18 puntos y 8 rebotes) y más tarde, cuando se rompe el encuentro definitivamente en el último cuarto, Thomas (18 puntos y 9 asistencias) o Smart (9 puntos 11 rebotes y 6 asistencias). Dominio absoluto.
El dato: El novato Jaylen Brown jugó 26 minutos sin anotar, y fue junto a Gerald Green, que jugó muy poco, el único Celtic en no hacerlo, pero tal ha sido el nivel de intensidad e inspiración de Boston, que es ese tiempo en que estuvo en cancha, el parcial fue de +17.
La clave: La intensidad, la salida fulgurante, y la tremenda circulación de balón, que cuajó en contraataques sencillos, triples abiertos y cortes claros hacia canasta. 16 de 33 en triples. 33 asistencias.
MVP. Avery Bradley. 29 puntos 6 rebotes y 3 asistencias, con 12 de 19 en tiros y 4 de 7 en triples. Partidazo, sobre todo en la primera parte, de un jugador que está alcanzando el mejor momento de su carrera en un punto absolutamente clave de ésta. Va a más cada partido, cada temporada. 20,3 puntos en las victorias, 6 en las derrotas. Enorme en su caracter y su esfuerzo, si está inspirado en el tiro es un jugador excelente.