El Real Madrid vuelve a ganar por tercer partido consecutivo en Liga sin Cristiano Ronaldo ante el Elche en la jornada vigesimoquinta. En la victoria para los blancos no echaron en falta al portugués debido al gran potencial en juego que les caracteriza. Los protagonistas en este encuentro con sus esféricos fueron: Illarramendi, Bale (GOLAZO en mayúscula sin duda) e Isco, desgraciadamente el Elche sufrió demasiado castigo aun demostrando un buen planteamiento en el Bernabeu.
Sin duda se vuelve a repetir la historia entre ambos equipos pero cambiando el escenario. En el encuentro de ida fue protagonista el árbitro por pitar un penalti a favor de los blancos que no existió, en el caso de esta tarde, el colegiado no presencio un claro fuera de juego de Benzema que dio a pie al 1-0 marcado por Illarramendi. El centrocampista vasco anotó su segundo gol con la zaga blanca, uno en Copa del Rey contra el Xátiva y su primero en Liga. Independientemente de los fallos arbitrales, quienes tienen derecho a equivocarse, los blancos mostraron una versión light de lo que nos tienen acostumbrados. La ausencia de Modric en el terreno de juego fue la clave para saber que el Madrid sin el croata le cuesta tener frescura e imaginación. Aún así, demostraron el potencial en juego que les caracteriza.
Los hombres de Escriba salieron con ganas, desde el primer minuto mostraron sus cartas en las que se reflejaba un buen planteamiento defensivo, y poco armamento en filo. Los dos laterales ilicitanos, Albácar y Cisma, considerados unos de los mejores de esta liga, apenas pisaron el campo hostil, dicho dato plasma la gran intensidad defensiva realizada por el Elche. Escriba tras el gol en contra intento adelantar las líneas dejándole la batuta a Rivera pero la barrera blanca sigue imbatible. Apenas crearon ocasiones de peligro.
En ambas partes del encuentro se vio un juego cansino, sin ritmo y con pocas ocasiones de peligro. Algo más de intensidad en los primeros y últimos minutos del partido por parte de los blancos. La zaga ilicitana no perdió la esperanza hasta que apareció Bale. El gales expuso unas de sus grandes virtudes, el cañonazo con la pierna izquierda, el esférico hizo que desaparecieran las sombras de una actuación gris. El lateral blanco no tuvo una de sus mejores tardes, no le salía nada, ni el uno contra uno, ni el desmarque, ni velocidad y potencia en campo abierto.
Con el marcador prácticamente sentenciado (2-0), el equipo de Escriba fue bajando la guardia permitiendo que los de Ancelotti obtuvieran un abanico amplio de llegadas al área de Herrera. En unas de las jugadas, Benzema, totalmente acertado durante todo el encuentro, cedió un pase a Isco que sacó productividad a la jugada para poder marca el 3-0. El malagueño supo aprovechar los minutos disputados para luchar por un puesto en el once inicial.
El partido acabó como caramelito en dulce a pesar de algún que otro bache producido durante la disputa del encuentro. Sin duda, es un buen resultado para los blancos que hoy pueden dormir como líderes provisionales a espera del Real Sociedad-Barcelona.