El italiano Trentin remacha en un sprint final de infarto el trabajo de sus otros 17 compañeros de fuga apareciendo de tapado, con Rojas y Egoitz García cuarto y quintos en una etapa relajada para los favoritos
Carlos Oleagoitia (@oleagoicarlos)
Ninguna victoria en el Tour es inmerecida pero si alguna se le pudiera acercar, quizás pudiera ser esta decimocuarta que acababa en Lyon con recorrido quebrado y en donde el pelotón optó por descansar, llegando am meta a más de 7 minutos y dando paso a que la fuga numerosa del día llegase a buen puerto. Lo avispado que fue el italiano Matteo Trentin (Omega) en el sprint final le puede conferir el derecho ser el ganador de la jornada, pero viendo el desgaste realizado y la actitud mostrada por otros muchos de sus compañeros en la gran fuga del día, la cuarta victoria para su equipo en esta ronda francesa bien podría haber sido meritorio para algún otro. ¡¡¡La vida es para los listos más que para los honrados!!!
Con el pelotón inmerso en las diatribas sobre si los abanicos de ayer fueron o no éticos aprovechando el pinchazo del segundo de la general, todos los equipos sabían que una fuga numerosa iba a ser la clave del día y en ella se incrustaron hasta 18 ciclistas que representaban a la mayoría de los equipos que contó con el beneplácito del pelotón, excepto el Euskaltel, que no metió a ningún integrante en la misma y se puso inútilmente a tirar del gran grupo cuando los fugados ya se habían distanciado. Por delante se relevaban bien el danés Lars Bak (Lotto), los alemanes Marcus Burghardt (BMC), Jens Voigt (RadioShack) y Simon Geschke (AG2R), los estadounidenses Tejay Van Garderen (BMC) y Andrew Talansky (Garmin), el belga Jan Bakelants (RadioShack), los galos Cyril Gautier (Europcar), Arthur Vichot (FDJ), Blel Kadri (AG2R) y Julien Simon (Sojasun), el ruso Pavel Brutt (Katüsha), los españoles Imanol Erviti (Movistar), José Joaquín Rojas (Movistar) y Egoitz García (Cofidis), el italiano Matteo Trentin (Omega), el inglés David Millar (Garmin) y el suizo Michael Albasini (Orica), y a 20 klómetros de meta empezaron las hostilidades.
A pesar de que algunos equipos contaban con dos representantes, el trabajo de equipo apenas tuvo rédito alguno y quien más lejos llegaría fue Simon (Sojasun), que a 15 kilómetros de meta aprovechó una cota de cuarta categoría para abrir rápido un hueco de 28 segundos que le puso muy cerca de la victoria ante las atónitas miradas de los demás fugados, en la típica estampa en este tipo de fugas de ‘tira tú que si lo hago yo no quiero que me remaches y prefiero no ganar a que ganes tú’. Pero los dos BMC, primero Van Garderen a 5 kilómetros de meta y finalmente Burghardt a falta de dos kilómetros, dieron dos buenos arreones que cazaban cruelmente al desconsolado Simon (Sojasun) bajo la pancarta del último kilómetro, pero el resto de fugados no pudo empalmar con los primeros hasta que faltaran 300 metros gracias al generoso empuje de Rojas (Movistar). Sin haberse destacado en toda la fuga, el joven Trentin (Omega) se lanzó a falta de 200 metros por la derecha de la calzada cuando todos esprintaban por la izquierda y batiendo in extremis a Albasini (Orica), uno de los más rápidos de la fuga, y a Talansky (Garmin), el más cercano al líder en la general y que daba un gran salto hasta quedarse a las puertas del top ten.
El Tour se adentra mañana, en plena fiesta nacional francesa, en la Provenza francesa en la decimoquinta etapa que los llevará en 242 kilómetros de Givors al Mont Ventoux, con la subida final al mítico puerto Hors Categorie que en sus 20 kilómetros finales y sobre todo en los páramos desolados sin vegetación de los kilómetros finales volverá a medir a los más fuertes de la general en un duro ascenso y en donde se espera el comportamiento de un Sky venido a menos en sus fuerzas a pesar de un Froome pletórico y la respuesta de las supuestas alianzas entre los españoles Contador (SaxoTinkoff), ‘Purito’ (Katüsha) y Valverde (Movistar) o las dobles balas con las que puedan contar algunos equipos con ciclistas destacados entre los primeros de la general. Además, ya se acabaron las etapas de transición o sin aparente relevancia, porque de aquí en adelante todas las etapas tendrán la general como nexo de unión.