Más de diez mil espectadores llevaron en volandas a los jugadores españoles (22-28)
Espectáculo inigualable el vivido hoy en la Caja Mágica de Madrid. El duelo entre Hungría y España no dejó a nadie insatisfecho. Los innumerables aficionados magiares daban la nota de color y tomaban la delantera a la hora de animar a los suyos, pero este hecho tan sólo fue el aperitivo de lo que no tardaría en llegar. Una incansable Charanga de la localidad Toledana de «Quero» (paisanos de Maqueda), caras pintadas con la rojigualda, banderas de los lugares más recónditos del país, y voces, infinitas voces que corearon todos y cada uno de los gritos de guerra del speaker.
Fue un partido más difícil de lo que muchos esperaban. Ya hemos repasado los mayores pecados de la selección española estos días, y cómo no, esto se repitió una vez más. Toma de decisión precipitada de los lanzadores, espacios defensivos exagerados, acumulación de minutos en los mismos jugadores a pesar de su falta de acierto y un portero ausente y falto de motivación por la escasa competencia directa. Ventaja mínima de los húngaros y primeros nervios en el banquillo local. Pero esta vez por fin, vimos un giro inesperado del equipo técnico español tras el segundo Time – Out en pista. Saltaron al campo jugadores menos habituales, y hubo un riesgo controlado con la defensa individual de Aitor Ariño sobre Laszlo Nagy, que hasta ese momento había destrozado a los nuestros con su potente lanzamiento exterior. He aquí el principio de la remontada. Con una Hungría atascada ante el despliegue defensivo de la roja, aparecieron los menos habituales para reivindicarse como solución a los males endémicos del aún poco efectivo sistema instaurado por Valero Rivera. Principalmente Aitor Ariño fue la clave, jugándose el tipo una y otra vez para «secar» al capitán Húngaro y convertirse en un dolor de cabeza constante para sus rivales, por su parte Ángel Montoro aportó equilibrio y lanzamiento exterior, Antonio García nervio y velocidad al balón, y Carlos Ruesga efectividad, imaginación y talento a raudales.
Croacia el último escollo de la primera fase
Con estos mimbres se construyó una victoria luchada, que permite a los nuestros llegar a la última jornada de grupos dependiendo de sí mismos para ser líderes de grupo, empresa un tanto complicada, ya que los croatas parten como favoritos dado su palmarés, y sobre todo, su superioridad ante el conjunto magiar el pasado miércoles.
#Handball2013