Fue una tarde completa en el Camp Nou la de ayer. El Barcelona, angustiado y desconocido a causa de la baja de Messi -¿qué equipo no se vería afectado por la baja del mejor jugador del Mundo?- no encontraba forma de meterle mano al quinto clasificado de la Bundesliga. Y todo porque el Leverkusen es un conjunto que sí sabe bien a lo que juega. Con premisas tan básicas como orden atrás y salida rápida buscando siempre terminar las jugadas, el equipo alemán se plantó en el Estadi con un saber estar que no tiene nada que ver con aquel al que hace unos años el Barça arrasó con cinco goles de Messi.
El paso de los minutos, poco a poco, fue provocando que se dieran todos los condicionantes para que los nervios se instaurasen en la grada. El equipo de Luís Enrique no encontraba la manera de encontrar con claridad la portería de Leno. Se entretenía, impotente, jugando entre Busquets, Mascherano y Piqué. Y mientras, el Leverkusen rondaba la portería de Ter Stegen, condicionado por sus actuaciones precedentes, nervioso. Y la tensión fue a más cuando el Bayer acertó al primer palo en una salida de córner que ni la defensa logró despejar ni el guardamenta alemán del Barça llegó a detener a tiempo. El 0-1, visto lo visto, ponía muy en contra el panorama para el cuadro blaugrana.
Y lo intentó. Aún así. Sandro, Neymar, Suárez. Iniesta. Buscaron huecos, tiraron de un concepto tan desconocido en el Camp Nou como ese llamado «heroica». Neymar se encontró con el palo. Suárez con un muro de piernas con medias blancas. Iniesta trataba de sortear rivales en solitario, sin compañeros que le devolviesen una pared. Y Sandro también pudo, pero se quedó en casi. Ni el paso por vestuarios aclaró las ideas del Barcelona, que solo se desperezó con la salida al campo de Sergi Roberto, héroe local, descubrimiento del año. El canterano puso ese extra de tensión y tras iniciar una jugada tras recuperación en terreno alemán aprovechó que Leno dejó la pelota muerta para rematar y poner el empate en el marcador.
El Leverkusen, perdido con los cambios, obligado a defenderse tras sustituir a sus dos delanteros titulares, condenado a la contra, no tuvo ya respuesta. Y un instante más tarde, Suárez, quién si no, remataba de primeras en la frontal del área grande perforando la portería de Leno con un chut imparable. De delantero centro.
Sufrida, sí, pero victoria que bien vale un liderato y que allana el camino a octavos, esperando tiempos mejores, esperando a Messi.
Ficha técnica:
Barcelona: Ter Stegen, Dani Alves, Piqué, Mascherano, Mathieu; Rakitic (Roberto, ’72), Busquets, Iniesta (Alba, ’61); Sandro (Munir, ’63), Suárez y Neymar
Bayer: Leno, Tah, Papadopoulos, Wendell, Donati (Hilbert, ’76), Bender, Çalhanoglu, Kramer, Bellarabi (Brandt, ’66 ), Kampl y Chicharito Hernández (Kiessling, ’54).
Goles: 0-1 (Papadopoulus, ’22). 1-1 (Sergi Roberto, ’80). 2-1 (Suárez, ’82).