Señores, esto se está acabando. Entramos en las últimas jornadas del campeonato, ya sólo quedan siete. Y la emoción es máxima. Empezando por arriba, donde nadie cede y a este paso Atleti, Barça y Real Madrid llegarán a la última jornada con el título en juego. A continuación, encabezando la Liga de los mortales, llega un Athletic que, pese a su derrota casera del sábado, mantiene intactas sus aspiraciones de Champions con un colchón ya de seis puntos sobre un Sevilla que dijo en Balaídos adiós a su gran racha, pero se mantiene quinto aunque empatado a puntos con una Real que no aprovechó en El Sadar la oportunidad de superar a los de Emery y sumó un solo punto; el mismo punto, por cierto, que separa a sevillistas y txuri-urdin del Villarreal, que también empató esta jornada. No ha habido, pues, grandes novedades en esa zona. Donde sí las ha habido es en los puestos de descenso, tal es así que Almería y Osasuna han caído al abismo tras perder unos en Zorrilla, contra un Valladolid que abandona la quema por su mejor goal-average, y otros no pasar del empate en su campo. Triple empate a 30 puntos que marcan una salvación de la que se aleja irremediablemente el Betis, cada vez más hundido con sus 22 puntos en el pozo de la tabla.
Alejandro Rozada (@alexrozada)
Un golazo contra el cáncer infantil
No fue un gol más, y no lo decimos únicamente por la bella factura del tanto. El gol que sirvió para cerrar la manita del Real Madrid al Rayo Vallecano fue un golazo en toda regla contra el cáncer infantil. Lo firmó Álvaro Morata, con un rapado en su cabeza detrás del que se esconde la historia más bonita de este fin de semana futbolero. El canterano madridista se cortó el pelo al cero en solidaridad con los niños enfermos de cáncer del madrileño hospital del ‘Niño Jesús’, todo un detalle por parte del delantero. En una muestra de humildad y desinterés, Morata aseguró al final del encuentro que «hay que cambiar de vez en cuando» sin querer prodigar a los cuatro vientos su gesto altruista. Fuentes cercanas al jugador se encargaron de confirmar esta causa solidaria y ya a pocos se les escapa la promesa de Morata con los pequeños más necesitados. El rapado se culminó con ese misil que se coló por la escuadra izquierda de la portería de Rubén en una espectacular metáfora de la importancia que tienen decisiones así para demostrar que al final los futbolistas están para hacer felices a los demás.
El (no) robo de Cornellá
De los creadores de una canción que insulta a la mujer de un jugador del Futbol Club Barcelona, llega el robo de Cornellá. ¿Perdón? ¿Robo, qué robo? Que si un supuesto control de Neymar con la mano en la jugada del penalti transformado por Messi, que si un posible penalti de Mascherano, que si la expulsión injusta de Kiko Casilla… Solo hay que ver las imágenes para reparar en que no hay mano de Neymar y la pena máxima está bien pitada porque sí hay mano de Javi López, el posible contacto entre el jefecito y el mismo Javi López es fuera del área, y la roja a Casilla es justa y necesaria por salir literalmente a por uvas para despejar el balón con la mano fuera de su área. Y el que se pique, ajos come. Bien triste resulta que los periquitos imiten la aberrante conducta llorona de algunos merengones y se refugien en el árbitro para disimular la derrota en el derbi catalán contra el Barça, justo final a un pobre planteamiento deportivo de Javier Aguirre y los suyos. Mejor se dedicaban a degustar las hermosas acciones que protagonizó Busquets en ese partido. Solo por ver esa poesía hecha fútbol en su estadio se pueden dar por servidos y agradecer a los culés que tuvieran la deferencia de obsequiarles con un gran repertorio de detalles futbolísticos de primer nivel. Porque esas cosas no se ven todos los días en Cornellá El Prat.
A hombros
Se merecen jugadores, cuerpo técnico y aficionados del Atlético de Madrid que los saquen a hombros en la última jornada. Pase lo que pase. La campaña que está realizando el flamante líder de Primera es para sacarlos por la puerta grande al final de la temporada. Aunque Simeone repita incansablemente la cantinela del «partido a partido», cada vez más aficionados ven a este equipo con vitola de campeón. La victoria del sábado en un escenario tan imponente como La Catedral, donde no fueron capaces de ganar este curso ni Barcelona ni Real Madrid, es la demostración evidente de que este Atleti va en serio, muy en serio, a por el título de Liga. Protegido por las manos de Courtois, espectacular su paradón a Aduriz para salvar los tres puntos; apoyado en una defensa muy bien custodiada por Filipe, Godín, Miranda y Juanfran; guiado por un Koke al que muchos ven ya como un nuevo Xavi; impulsado por la magia a raudales de Arda; e insaciable gracias a los goles de Diego Costa, los hombres del Cholo fueron capaces de ganar al Athletic en el nuevo San Mamés, algo que solo habían conseguido esta campaña el Espanyol en Liga y ellos mismos en la Copa (1-2). Portentoso triunfo, remontada incluida, de los colchoneros en un partidazo que constituyó un homenaje al fútbol en toda regla. A falta de tener más arraigada en la capital de España la tradición de sacarlos a pasear en gabarra por las aguas del río Manzanares, las puertas de este burladero ya están abiertas de par en par para que desfilen por aquí los héroes del campeonato.
El Valencia tira la Liga
Para tirar una liga ya no hace falta ser primero, segundo o tercero; basta con ser octavo y estar a diez puntos del acceso directo a la Europa League, o a nueve del séptimo que este curso también concede pasaporte europeo. Después del sorprendente batacazo en casa contra un Getafe que venía de quince jornadas sin ganar, se acabó la Liga del Valencia. A partir de ahora, la andadura che por el campeonato será un simple trámite a resolver de la manera menos dañina posible. Como si Pizzi decide dar descanso a los componentes de la primera plantilla y afronta el resto de la temporada con jugadores del filial. Pero casi mejor que no tome esta decisión porque un Mestalla que lucha por eludir la quema del descenso, no está en condiciones de regalar futbolistas. Como los valencianistas se empeñen en protagonizar más capítulos como el que le costó la expulsión a Mathieu, no quedará más remedio que desvalijar al filial. Paradójicamente, el proyecto de Amadeo Salvo pende de un hilo europeo. Porque solo ganando la Europa League, ahí es nada, podría salvar los muebles. Un torneo que debería culminar una temporada aceptable se erige en la tabla de salvación de una institución en venta. Se presume una semana clave para el valencianismo, porque el 1 de abril se cierra el plazo de presentación de ofertas vinculantes para la adquisición del club y el jueves se jugará el primer asalto contra el Basilea de los cuartos de final de la antigua UEFA. A ese clavo ardiendo se aferra el Valencia. No hay más.
Se acaba el sueño del Betis
La situación parecía idílica después del triunfo del pasado jueves contra el Levante en el Ciutat de Valencia. Con el siguiente partido en casa ante el Málaga, el terreno parecía abonado para seguir soñando con la permanencia. Pero llegó el lunes, la cita contra los de Schuster y el Betis se dejó ir. Les remontaron el gol inicial de Lolo Reyes y los tantos de Juanmi y Darder construyeron un obstáculo insalvable, contra el que incluso se estrelló Ruben Castro al mandar a la madera un penalti en el descuento. Todo les salió mal a los sevillanos que ven disipadas así sus escasas opciones de salvar la categoría. El descenso parece cantado y, aunque las matemáticas indiquen que todavía no es un desenlace definitivo, pocos dudan de que el Betis descenderá. La mala suerte y la desorganización general en la institución han llevado a vivir una situación límite a uno de los históricos de nuestra liga. Aún así, su afición los seguirán apoyando. Manque pierdan.
EL SACAPUNTAS
Simeone: «Déjennos vivir y disfrutar de nuestra realidad»
Os dejamos, pero dejadnos a nosotros seguir piropeando al flamante líder. Partido a partido.