El Real Madrid sentencia el pase a la final con un 3-0 ante un Atlético de Madrid descohesionado, con poca presión por la parte delantera y floja en la zona defensiva. Los blancos realizaron un partido intenso, obteniendo la posesión del balón y creando ocasiones de peligro. Pepe, Jesé y Di María fueron los autores de los esféricos blancos. El canterano Jesé una vez mas deslumbro en el Bernabeu realizando la llamada hacia la tituralidad. Los hombres de Simeone estuvieron inreconocibles. Los rojiblancos rompieron la racha de las veintres victorias consecutivas ante un Madrid bien estructurado.
Sin ninguna duda el Madrid dominó en la primera parte. Los hombres de Ancelotti aprovecharon la mala situacion de los rojiiblancos en el terreno de juego para hacerse con la posesión del encuentro. El partido fue intenso, con varios encontronazos por varios jugadores de ambas entidades y con mas ocasiones de peligro para la zaga blanca. El marcador se abrió en el primer cuarto, en un disparo de Pepe que desvió Godín. El central luso fue protagonista tambien por los roces que tuvo con Diego Costa que una vez más se vio metido en el ajo en las polemicas de las faltas realizadas y recibidas. Independientemente de la descohesion por parte de los Simeone, en el bando blanco cuentan con un diamante en bruto que se crece cada dia más. El canterano Jesé vuelve a dejar huella en el terreno de juego dejando impregnado su calidad, rapidez, potencia y seguridad. Unos de los pocos peligros creados por los atleticos fue tras una falta directa, Miranda recibio el rechace e intentó rematar pero acabó desviando el esférico Casillas.
Al descanso se fueron con el marcador abierto (1-0) para seguir luchando por el pase a la final en la Copa del Rey. Simeone empezó el segundo acto introduciendo al Cebolla para darle la vuelta a la tortilla al juego pero por mucho cambios que realizara el argentino su equipo no tenía la tarde. La zaga blanca seguía dando intensidad al partido, pendientes a los detalles, creando peligro y bloqueando a los rojiblancos. Jesé, a los pocos minutos de la segunda parte, se desmarca tras recibir un gran pase al área del argentino Di María. Jugadon y jugadorazo por parte del canario. Practicamente el resultado seguía abierto después de una gran oportunidad rojiblanca que acabo sacando Modric bajo palos. Tras el ataque rojiblanco se produjo el contra-ataque blanco en un fallo de Adrián que acabó recogiendo Di María y marcando el 3-0, aunque la volea fue desviada otra vez por un central rojiblanco, esta vez por Miranda. El Madrid con el tercer gol no dejó de presionar y continuar buscando ocasiones de peligro. Courtois, protagonista de los atléticos, obtuvo trabajo durante los 90 minutos del encuentro. Sin embargo, Casillas apenas tuvo trabajo, siguio acumulando registro para sus records personales e invictus en un derbi.
El encuentro acabó con la victoria blanca que acabo con sabor de revancha y con la mirada puesta hacia la final, o por lo menos eso se puede apreciar. Cierto es que en el fútbol nunca se sabe, pero el Atlético de Madrid lo tiene muy difícil en el Calderón. De momento la ida de la semifinal de la Copa del Rey fue puramente blanca.