El gol de Larrivey deja al Rayo a tres puntos de la salvación
Los de Pizzi acusan el cansancio de la Europa League
Marta Perogordo (@MartaPrgd)
El Estadio de Vallecas se encontraba repleto para animar al Rayo Vallecano, que se enfrentaba al Valencia. El equipo local, en penúltima posición en la tabla, necesitaba los tres puntos para no alejarse de la posibilidad de la salvación. Por otro lado, se encontraba un Valencia que llegaba a Vallecas con la intención de conseguir los tres puntos que le permitiesen seguir escalando posiciones en los puestos de arriba.
Las numerosas bajas en el conjunto che, especialmente la de Dani Parejo, y el cansancio acumulado después del partido de la Europa League, hicieron mella en un equipo que no supo encarar el partido y se fue diluyendo en el terreno de juego. En el inicio parecía que el Valencia tenía intención de controlar el balón, dejando al Rayo lejos de tener alguna ocasión hasta pasados los diez minutos de la primera parte. Sin embargo, el nerviosismo empezó a asomar en el quipo valencianista, llevando a tener numerosas pérdidas de balón. El mal juego, y la gran defensa del Rayo, consiguieron que durante la primera mitad el marcador no tuviese cambios.
El inicio del segundo tiempo comenzó igual de mal que el primero. Pizzi cambió rápidamente a Míchel para dar paso a Jonas, sin embargo, la entrada del brasileño no fue lo revulsiva que esperaba el entrenador valencianista. Fue entonces cuando el Rayo aprovechó un error defensivo para inaugurar el marcador y conseguir el único gol que se vería en todo el partido. Larrivey aprovechaba un desmarque de su defensor para mandar un cabezazo al fondo de la red. Un tanto que significa seguir con vida para los vallecanos, un golpe de fuerza moral que les anima a no bajar los brazos y seguir luchando por la salvación.
El Valencia lo intentó. Pizzi siguió moviendo el banquillo con intención de buscar salida al balón y generar alguna llegada al área, pero no era la noche de un equipo que se mostraba sin ideas. Y mientras buscaban recomponerse y buscar el tanto del empate, llegó la expulsión de Barragán, por doble amarilla, en el minuto 75. Y ahí se acabaron las esperanzas del equipo che.
Una derrota que termina con la buena racha que había encadenado el conjunto blanquinegro y que supone una recesión en su lucha por los ansiados puestos europeos.