Por Enrique Molina (@CronoBasket)
La gran sorpresa de la jornada fue la primera derrota del Real Madrid, que cayó ante un Valencia que hizo el mejor partido dela temporada.
Real Madrid 105 – 110 Valencia Basket
El equipo taronja respondió al triple inicial de Rudy con un 0-8 y llegó a tener una ventaja de nueve (5-14) en un arranque fulgurante. Rudy y Llull dieron la réplica y tras una fase de intercambio de golpes, el Real Madrid se puso cinco arriba con 5 puntos de Llull y una canasta de Slaughter (27-22). Dos espectaculares canastas de Lucic dejaron el marcador en 27-26 al final del primer cuarto.
Dos triples de Lafayette y Lavrinovic pusieron de nuevo a Valencia Basket mandando en el partido. Sergio Rodríguez y Rudy se combinaron para un parcial de 0-6 al que respondió el equipo taronja con otro de 0-10 (39-46) con seis puntos de Sam Van Rossom. Precisamente los dos primeros del belga llevaron a que al paso por el ecuador del segundo cuarto ya hubiesen anotado todos los jugadores taronja. El equipo no levantó el pie del acelerador y con un espectacular al alley-oop culminado por Lucic y dos tiros libres de Van Rossom después de una antideportiva alargo el parcial favorable a 3-18. El partido se fue al descanso con 42-54 en el luminoso del Palacio de los Deportes.
Aunque la reanudación empezó con una canasta de Doellman, el Real Madrid consiguió un 7-0 que obligó a Perasovic a parar el partido. Con el equipo blanco apretando para acercarse irrumpió Romain Sato con seis puntos para proteger la ventaja taronja. Un triple de Sam Van Rossom y dos buenas canastas interiores de Lavrinovic y Doellman dispararon la ventaja hasta los diecisiete (56-73 min.26). Sergio Rodríguez asumió el peso ofensivo de su equipo, pero cinco puntos de Lucic y una canasta de Lavrinovic pusieron una máxima ventaja de veinte (61-81) a poco más de un minuto para el final del cuarto, al que se llegó con un marcador de 66-86 tras dos acciones individuales de Lafayette.
Valencia Basket llego a tener ventajas de hasta 23 puntos al inicio del último parcial. El Real Madrid, invicto en su campo tanto en Liga como en Euroliga hasta este partido, sacó el orgullo intentando recortar la desventaja. Y con dos parciales de 6-0, con dos canastas valencianas en medio, bajaron hasta el 80-95 a falta de cinco minutos para el final. Tras el tiempo muerto de Perasovic, Bojan Dubljevic y un alucinante 3+1 de Sato alejaban de nuevo la remontada blanca (88-103 min.37). Pero el Real Madrid no bajó los brazos y llego a ponerse a siete a minuto y medio para el final. Un triple de Sato pareció rematar el partido (96-106) a 55 segundos del final, pero el Madrid llego a acercarse hasta a cinco en los últimos segundos. El marcador de este precioso partido para guardar en videoteca se paró al final en 105-110
Unicaja 80 – 71 Obradoiro
El equipo malagueño en los primeros minutos cogió las primeras ventajas, sobre todo gracias a dos triples seguidos y más tarde a la anotación de los jugadores interiores. Fran Vázquez, Caner-Medley y Stimac imponían su superioridad física. Precisamente una canasta del pívot de Chantada puso la que sería hasta el momento la máxima diferencia (17-9 m.6). En torno a esta distancia se mantuvo el marcador cuando terminó el primer cuarto (26-19).
A partir de aquí el partido vivió un quiero y no puedo del Río Natura Monbus, que en varias ocasiones pudo acercarse a los malagueños. Un triple de Guillén (veterano que esta temporada ha hecho un temporadón con nuestros chicos del Clínicas en la Adecco Oro hasta hace un mes, cuando fichó por Obradoiro) acercaba a los suyos 30-26, pero tres canastas consecutivas de Zoki Dragic volvieron a poner un poco de tierra de por medio para el Unicaja. Así al descanso se llegó con 45 a 38. El Unicaja dominaba, pero el partido tenía peligro y no debía relajarse en ningún momento.
La salida de los vestuarios del Río Natura Monbus estuvo comandada por un gran Pumprla. El alero checo tras 5 puntos consecutivos puso el partido 45-43, toque de atención más que evidente para el Unicaja que de nuevo debía reaccionar ante el peligro gallego que se acercaba. Primero fue un triple de Suárez y más tarde otro de Calloway, canastas que sirvieron para dar cierta tranquilidad a la parroquia malagueña (56-49 m.27).En los minutos restantes del cuarto la muñeca de Suárez volvió a aparecer desde el 6,75, acompañada por 2 tiros libres de Dragic que dejaban el partido con 64-56 a falta de un período.
El marcador no permitiría ninguna relajación, eso lo tenía claro el Unicaja. Más, sabiendo lo bien que se la da al conjunto gallego el pabellón malagueño (ganó en las últimas dos visitas). Por ello, el último cuarto fue en el que el Unicaja mejor defendió, dejándolo en tan sólo 15 puntos. Los de Plaza sabían que si no querían una sorpresa negativa podían atacar con más o menor acierto, pero la victoria pasaba por estar duro atrás. De hecho, en los primeros 5 minutos de este último cuarto el parcial del mismo era 4-6 para los visitantes. Plaza pidió tiempo muerto con 68-64 tras canasta de Dewar y, tras el minuto de indicaciones, Caner-Medley y un triple de Kuzminskas dieron la tranquilidad definitva (73-64 m.38). En los instantes finales la defensa malagueña no dio opción, incluso llegando a los tiros abiertos de Corbacho, el mejor triplista de la liga que ya hizo daño en el pasado en el Carpena.
Al final, victoria por 80 a 71, con una anotación muy repartida, con 5 jugadores con 10 o más puntos. Datos que hablan del buen ataque malagueño. Quinta victoria seguida del Unicaja que le afianza en la 4ª posición de la Liga Endesa.