El técnico sevillista vuelve a llevar a la victoria a su equipo ante el Villarreal, esta vez por 0-2, ganándole la partida a su rival por cuarta vez esta temporada
Hace tres semanas, después de haber perdido en el partido de ida de La Liga en el Sánchez-Pizjuán, Marcelino afrontaba la eliminatoria de Europa League ante el Sevilla, con una rueda de prensa un tanto absurda. Se quejaba de la dureza empleada, a su juicio, por los pivotes del conjunto sevillano, en un partido en el que los de Nervión tan solo hicieron cuatro faltas más que el submarino amarillo. Cuanto menos era curioso y sin duda se volvió en su contra. El técnico del Villarreal ha carecido de argumentos en cada uno de los tres enfrentamientos en los que se ha visto las caras con el Sevilla y en los que ha salido derrotado con creces. Balance de 2-7 en contra y repaso de Unai Emery que ha utilizado sus armas a la perfección.
En el once de Emery, dos jugadores ofensivos, Bacca y Vitolo, y el resto de corte defensivo. Diogo por la derecha e Iborra de enganche como en los últimos partidos. Por su parte, Marcelino dio descanso de inicio a Vietto y Trigueros, algo aún más incomprensible. Si el partido ya de por si era anormal, la lluvia tuvo su papel, y dejó el terreno de juego en bastante mal estado. Todo esto, los ánimos de revancha, y el tercer partido en dos semanas prometían. El partido comenzó como los dos últimos, con dominio territorial local, pero con balones largos del Sevilla en busca del faro de Iborra. De hecho, en el minuto dos, llegó la primera en la que una peinada del valenciano y un fallo de Mussachio en el despeje, propició un uno contra uno de Bacca que gracias a la lentitud del terreno dio opción de llegar a la zaga para mandarla a córner. El primer tiro a puerta lo hizo Carriço en el minuto 12, hasta entonces todo eran minutos de tanteo, aunque el Sevilla empezó a dominarlo todo. Fue poco el tiempo en el que los nervionenses se hicieron fuertes en el centro del campo y se acercaban aunque sin demasiado peligro, a la portería rival, exceptuando un disparo de Vitolo en el área pequeña que sacó Asenjo. A partir del ecuador de la primera mitad, el Villarreal comenzaría a tener mayor presencia en campo sevillista. Pasaban los minutos y el peligro se cernía sobre el área visitante, y en el minuto 32 llegaría la gran primera ocasión del Villarreal, un disparo de Moi Gómez que rechazaría Sergio Rico y que Coke envió a córner. Ya todo sería un acoso y derribo amarillo hasta el pitido final. Ocasiones muy claras, una tras otra, sobre todo llegando por la banda derecha donde Tremoulinas se veía desbordado una y otra vez. Pero no solo por la izquierda, tocaban y tocaban hasta encontrar opciones, pero la defensa sevillista era un auténtico muro. Un balón tras otro era estrellado por los castellonenses en el cuerpo de los blancos. La más clara del partido llegaría en el 41, cuando Moi Gómez estrelló la pelota en la cruceta.
El descanso fue un alivio para Emery y su equipo, que se recompuso de nuevo en la reanudación. La segunda parte se inció como un calco de la primera. Tanto es así que en el minuto cuatro, una internada de Diogo por la derecha acabó con un exquisito taconazo para Coke, que la posó en el palo derecho de Asenjo adelantando al Sevilla en el Madrigal. La segunda parte fue un quiero y no puedo por parte de los amarillos. Una vez más después de una mayor insistencia, encajaban un gol con lo mínimo. El oficio del Sevilla tumbó la moral de los de Marcelino. Ni la entrada de Vietto y Trigueros le dieron una mayor profundidad al equipo. La pegada del Sevilla es incontestable, y el nuevo pupilo de Del Bosque, Vitolo, lo demostró en el 64, cuando empalmó dentro del área un centro de Coke tras una gran jugada de Banega. 0-2, y partido concluido por KO. Marcelino impotente en la banda no supo reaccionar una vez más a la superioridad táctica de su homólogo sevillista. Dos disparos con peligro de Vietto y Uche a falta de cinco minutos, fueron lo más destacable de lo que quedaba de encuentro. Al final, el Sevilla le ha ganado tres partidos a su rival en la tabla, y se marcha a seis puntos del submarino amarillo, que tendrá que ir a Mestalla en la próxima jornada, mientras que el Sevilla recibirá a un Athletic Club en alza.