Entrevista a Miguel Ortega Amusco (@Miguel_Ortega13), jugador de baloncesto, actualmente jugando en la liga Báltica con el Valga Maks&Moorits, un linense que está de moda en Europa.
Para los que no te conozcan, ¿quién es Miguel Ortega Amusco?
¡Hola a todos!, pues soy un chico de 23 años recién cumplidos, nacido en La Línea de la Concepción, jugador profesional de baloncesto, que estudia ADE por la UNED y un grado superior de Gestión Comercial y Marketing, a distancia también. Soy una persona muy cercana a mi gente me gusta ayudar a todo el mundo cuando lo necesita, soy inquieto y divertido, trato de ser positivo, trabajo por lo que quiero y soy muy ambicioso , llevar dos temporadas recorriéndome el mundo por el baloncesto… ¡lo demuestra!
Tengo entendido que antes jugabas al fútbol, ¿qué te hizo cambiar al baloncesto?
Bueno, cuando tenía 5 ó 6 años empecé a jugar a fútbol y estuve varios años jugando en diferentes equipos de mi ciudad, el último año no disfruté y con 11 años que tenía decidí dar el cambio y probar cosas nuevas. Para ser sincero, estaba entre tenis y baloncesto y mi primera opción fue el tenis pero recuerdo no poder apuntarme por culpa de una lluvia que suspendió las clases de aquel día y yo soy muy supersticioso, sin ir más lejos a día de hoy los días de partido tengo más de 50 rutinas diferentes ¡y no estoy exagerando! así que opté por el deporte de la canasta ya que mi padre también había sido jugador, probé y el resto ya es historia… Doy gracias por aquel día que llovió, porque debido a esa elección final he podido vivir cientos de sueños y puedo ganarme la vida con el trabajo que más me gusta, soy muy afortunado.
¿Cuál fue tu reacción al enterarte de que estabas convocado por la Selección Española?
Tenía 15 años, estaba en mi cuarto, en la residencia de Málaga, sonó el teléfono y era mi madre diciéndome que había una lista en internet que ponía »algo así» como que había una pre-selección española para un campeonato de Europa, y que mi nombre estaba en la lista, recuerdo perfectamente la sensación que tuve en el momento que entendí lo que pasaba, se me hizo un nudo en el estómago, no me salían las palabras y solo podía llorar y gritar, mis compañeros entraron en el cuarto asustados y cuando pude explicarles lo que pasó me abrazaron y me felicitaron, fue uno de los mejores momentos de mi carrera. Cuando entré en la lista definitiva fue en Fuenlabrada en la última concentración antes de salir para Grecia, se hizo el último descarte y subí corriendo a mi cuarto a llamar a mis padres y a todo el mundo, iba a jugar un campeonato de Europa, fue increíble.
¿Qué te llevó a jugar fuera de España?
Un poco todo. El baloncesto en España está muy difícil, presentaba muy poca estabilidad con tantos equipos desapareciendo cada año y con muchos problemas que salían cada verano y durante la temporada de tantos y tantos equipos. Me salió la opción de irme a jugar a Dinamarca, una primera liga de un país, con un buen nivel en baloncesto ahora mismo, era para ir de base titular con muchos minutos y no lo dudé, fue sin duda el paso correcto y cómo salió me dio la razón: máximo asistente de la liga, de toda la historia del país en una temporada y mejor jugador comunitario del año, además peleamos por la medalla de bronce siendo un equipo recién ascendido, fue un gran año.
Eso me llevo a recibir varias ofertas del extranjero durante el pasado verano, mejores que las que recibía de España tanto económica como deportivamente, siendo esto último lo principal para mí y decidí volver a embaucarme en una nueva aventura, me ha valido para hacerme un mejor nombre en España y sobretodo en Europa donde cada temporada me van saliendo mejores opciones. Está claro que no se vive en ningún lado como en España, pero estoy en mi trabajo y tengo que tener todos los factores en cuenta, al final cuando pones todo en la balanza y ves de qué lado se decanta, tomas la decisión.
¿Cómo fue estar en el Spartak-Primorye?
El Spartak es un equipo para empezar que está en la otra punta del mundo, es el primer equipo en el que he estado que era el club más importante de la ciudad, ha sido una experiencia muy buena en ese sentido ya que los jugadores éramos muy conocidos por todo Vladivostok, con carteles nuestros por las calles y cosas por el estilo, ahí noté una gran diferencia. Además, al estar pegado a Asia hicimos la pretemporada en China y en Corea del Sur, todo eso ha sido muy diferente y muy bonito de vivir.
¿Qué es lo que más y menos te gustó de vivir en Vladivostok?
Me gustaba que la gente me parase en el supermercado y me diera suerte para el siguiente partido en casa o que después del partido me dijeran que muy bien o me animasen, teníamos buenos fans y eso te hacía sentir más arropado, era además una ciudad grande y muy bonita y vivía cerca de algunos compañeros por lo que había muchas cosas para hacer.
Por el contrario lo que menos me gustaba de la ciudad era el cambio de horario que había, 9 horas de diferencia se hacían muy pesadas ya que mientras yo tenía el tiempo para hablar con mis amigos o familia ellos estaban durmiendo y cuando yo me iba a dormir ellos empezaban sus tardes, me sentía un poco solo a veces y eso estando tan lejos cuesta.
¿En qué se diferencia el Valga Maks&Moorits al resto de equipos en los que has jugado?, ¿cómo es vivir en Valga?
Jugar en la liga Báltica con el Valga ha sido diferente a todo lo que he jugado antes, ya que es una liga que incluye los mejores equipos de Lituania, Letonia, Finlandia, Suecia, Kazajastán y Estonia, por lo que hemos tenido que jugar »partidos de liga» en otros países, y contra equipos con mucha tradición e historia, seguir conociendo gente, sitios, aprendiendo de todo tipo de culturas y costumbres diferentes a la vez que juego a baloncesto es una pasada.
Valga es una ciudad completamente opuesta a Vladivostok, lo que más me gusta de aquí es que está todo a mano, puedo ir al supermercado en 2 minutos andando , al pabellón en cinco y al restaurante a comer en 3, sin embargo al ser una ciudad tan pequeña y que además está un poco alejada de grandes ciudades hay muy pocas cosas de ocio, como unos cines o algo por el estilo, solo hay una sala de billar y bolera así que aprovecharé para mejorar al billar y sorprender en verano a mi abuelo, ¡que ha sido muy bueno jugando!
En lo profesional, ¿qué te gustaría revivir?
Me gustaría tener la sensación de ganar un campeonato de España otra vez, recuerdo los dos que gané y fueron increíbles, sobre todo por el trabajo realizado durante el año, hay muchos momentos que me gustaría revivir para volver a sentirlos de la misma forma (canastas ganadoras en el último segundo, partidos con remontadas increíbles…) y también hay otros momentos que me gustaría revivirlos para hacer algún cambio, sería el caso contrario, canastas importantes falladas o partidos malos…, pero todos estos momentos también me han servido para madurar como jugador y aprender de cada uno de ellos, en mi mente no está la palabra perder… Unas veces se gana y otras se aprende.
Un partido que te haya marcado.
Hay varios que me han marcado en mi carrera, mi debut internacional con España, mi debut profesional… aunque hay uno que recuerdo en mi época de cantera que fue muy especial, jugábamos el campeonato de Andalucía en Málaga, y toda mi familia y amigos estaban allí, sabía que tenía que hacerlo bien porque también había entrenadores y era una buena oportunidad, conseguí el MVP con 41 de valoración y recuerdo muchas veces ese partido.
Como profesional jugar un partido de play off de ascenso a LEB hace 4 años con Carballo, era un equipo hecho para la permanencia y conseguimos superar todas las expectativas, no logramos ganar, pero recuerdo vivir una semana previa muy intensa y llena de buenas emociones, el pueblo se volcó con nosotros.
¿Alguna anécdota para recordar?
Son muchas, desde luego, por elegir una… recuerdo el primer entrenamiento que tenía en mi primera temporada como profesional, mientras encontraban mi piso estaba en un hotel relativamente cerca del pabellón, recuerdo estar tan nervioso la noche anterior que no podía dormir y de estar viendo pelis en el ordenador y demás se me olvidó poner la alarma en el móvil, me desperté 15 minutos antes del entreno y no recuerdo haber corrido con tanto agobio en mi vida… llegué justo 5 segundos antes que entrara el entrenador por la puerta, ¡me libré por poco!
¿Con quién te quedas?
– Un compañero de vestuario: Gonzalo Sánchez y Endika Bahillo. El primero hizo de mi hermano mayor en mi primera experiencia profesional y a día de hoy me sigue ayudando siempre que lo necesito, un ejemplo a seguir para mí en todos los sentidos. El segundo porque no me lo he pasado tan bien con alguien en una temporada como con él, éramos muy parecidos y nos gustaba estar todo el día por Bilbao dando vueltas o en casa de uno y de otro hablando y pasando el tiempo.
– Un jugador: Magic Johnson, desde que mi padre me puso un vídeo suyo siempre he querido parecerme a él, la manera de disfrutar y HACER disfrutar a los demás con ese tipo de baloncesto es, nunca mejor dicho, MÁGICA, me gusta copiarle movimientos y creo que ha sido el ejemplo de muchos bases modernos.
– Un entrenador: Eusebio Benito, de La Línea. No solo cuenta la figura del entrenador en si misma sino también la de la persona. El me subió de equipo cuando empecé a jugar a baloncesto confió mucho en mí y me enseñó mucho, pero me quedo con el por encima del resto por todo lo que me quiere y me ayuda, siempre sigue mis partidos, me da sus consejos y siempre me apoya en lo personal cuando lo necesito.
– Un equipo: El ULB. Lo tengo clarísimo, el equipo sin el cual no estaría aquí, no hubiera cumplido mis sueños y donde están mis amigos jugando y mi familia en el club, mi equipo es y será siempre el Unión Linense de Baloncesto.