Tan solo nueve jugadores de los 25 que se proclamaron campeones de Liga hace dos temporadas con la camiseta rojiblanca, permanecen bajo la disciplina de Simeone. Unos por finalización de cesiones, casos de Courtois o Diego Ribas; de contrato, caso de Villa; cedidos válidos que no volvieron al club, caso de Alderweireld; pero en su gran mayoría fueron ventas, casos de Diego Costa, Arda Turan, Miranda, Mario Suárez, e incluso Filipe Luis )aunque esta temporada vuelva al Calderón tras un fugaz paso por el Chelsea). El Atlético de Madrid es un club que vive en una continua descomposición y recomposición de la plantilla, temporada tras temporada, y eso encontrándose en uno de sus momentos más estables, sino el de mayor estabilidad en el banquillo de la historia del club, con Simeone al mando y renovado hasta 2020.
Tras una nueva temporada cumpliendo el objetivo de situarse entre los tres primeros de la tabla, haciendo un gran papel en la Champions League quedando eliminado en los cuartos de final, al igual que en Copa del Rey, por el tramo más duro del cuadro, y sin olvidar la Supercopa de España lograda con goles de Raúl García y Mandzukic ante el eterno rival, se viene una nueva temporada de retos, otro más difícil todavía en el que, tanto el binomio blanco-blaugrana ha reforzado sus escasos puntos débiles, como Valencia y Sevilla, que vienen empujando con dos grandes plantillas con la intención de ser la alternativa de la Liga y romper la dictadura del binomio como hace dos campañas lo logró el Atlético.
Para afrontar este nuevo reto, Simeone ha conformado una plantilla amplia en la que contrastan la veteranía de jugadores como Godín, Gabi, Tiago, Raúl García o Torres, con la juventud de Giménez, Saúl, Óliver Torres, Correa, Carrasco o Vietto, a los que hay que sumar otros jovenes, no novatos y muy consolidados, casos de Juanfran, Koke, Filipe, Griezmann o el colombiano, ex del Oporto, Jackson Martínez. Una plantilla larga y compensada, a falta de alguna incorporación que se pueda dar de última hora en el medio campo, para afrontar con garantías las tres competiciones.
Por primera vez en diez años, el Atlético de Madrid no tiene que jugar ninguna eliminatoria previa para acceder a competición europea y ninguna Supercopa, lo que supone que no se condiciona en ningún caso la preparación durante la pretemporada, y eso, con un gran experto en la preparación física como es el ‘Profe’ Ortega, significa que el rendimiento del equipo debe ser óptimo durante gran parte de la temporada. Por lo que se ha caracterizado el Atlético en esta exitosa etapa, es básicamente por ser un bloque compacto y unido en el que no destacan las individualidades, que las hay, pero siempre al servicio del grupo.
Con un amplio abanico de posibilidades en cada línea, Simeone tiene una gran plantilla. Empezando por la portería, con dos grandes porteros como Oblak y Moyá, que la temporada pasada ya demostraron que podían defender con creces el arco rojiblanco; en defensa se presume como titular, a falta de Miranda, la defensa campeona de Liga (Juanfran, Giménez, entrando por el citado brasileño, Godín y Filipe Luis), además de recambios experimentados y de calidad como Jesús Gámez, Savic, Siqueira y el joven, aunque preparado, Lucás Hernández. En el medio, como en la delantera, el abanico de posibilidades es muy amplio. Simeone ya dijo que podría poner a Koke más atrás junto a Gabi o Tiago; además, Saúl, Oliver o Raúl García se pueden unir al trabajo del medio. Se cuenta con bandas (Carrasco, Griezmann o Vietto saben ocuparlas y explotarlas), mientras que Jackson, Torres o Correa se ocuparán de generar espacios y goles.

Jackson Martínez, que costó 35 millones, es el fichaje estrella del Atlético para la próxima temporada.
El 22 de agosto empieza la Liga y el Atlético recibirá a un histórico recién ascendido, la U.D. Las Palmas. Será el primer partido de la temporada para los de Simeone, después vendrán otros. En las nueve primeras jornadas, los colchoneros se las verán con los seis primeros clasificados de la pasada campaña, no es un calendario asequible en absoluto, pero este equipo es fuerte en el partido a partido, a partir de ahí lo que tenga que llegar, llegará, aunque para empezar, Las Palmas en el Calderón.