La República Checa y Polonia se enfrentaron con el objetivo legítimo de conseguir una buena clasificación en este mundial. Quizá con un poco de decepción por no haber entrado en las semifinales, pero sabedoras de que iban a tener dos oportunidades de quedar por delante de Lituania, Alemania, USA o Serbia. De entrada, el ganador podría decir que había estado por encima de USA sin esperar dos días.
Así, Polonia salió metida en el encuentro, con la rotación de las grandes citas, y apoyada en lo mejor de su juego, el colectivo; así llegó a irse 16 a 9 en el marcador, antes de que la tenaz cuadrilla de guerreros Checos recuperase el aliento, y el pulso al encuentro. El primer cuarto terminaría, así, igualado a 23. El segundo fue una confirmación de que ambos querían ganar, partido serio, con defensas aplicadas y rotaciones que dejaban claro que iban a jugar «los buenos».
A Satoransky le habían entrado los triples, y se le unieron dos jugadores que no pudieron (o supieron) brillar ante Australia, y que habían hecho buen torneo, los importantísimos para Chequia, Hruban (15 de valoración) y Bohacik (11 puntos), el segundo todo un descubrimiento del campeonato, el primero un tirador y anotador contrastado. Toda vez que Polonia perdía su acierto en ataque, los Checos se marcharían al descanso 35 a 42, habiendo alcanzado los 10 de diferencia.
Polonia demostró que tiene mil vidas, y en el segundo cuarto destapó un acierto que habían perdido en los 10 minutos anteriores. Hruban estaba haciendo un gran partido, y la réplica la daba Wascynski, Satoransky y Slaughter, dirigían con maestría. Los Checos hicieron dos intentos en el último cuarto por romper el ecnuentro, al primero respondió Slaughter, que con 12 puntos y 10 asistencias, hizo un gran encuentro, y su dúo con Wascinsky (22 puntos) permitió neutralizar de nuevo. El segundo arreón fue el definitivo. Al final, 94 a 84 en un partido que tuvo momentos preciosos entre dos equipos que quisieron ganar. Polonia sólo había participado en un mundial, y no podrá mejorar esa 5ª plaza, los Checos debutan como República Checa, y a falta de un partido, asegurar la 6ª plaza y luchar por la 5ª, es un premio justo a su campeonato. Satoransky terminó con 22 puntos, 12 asistencias y 29 de valoración. Bohacik terminó con 21, pero el hombre del encuentro fue un brutal Hruban, que finalizó con 24 puntos, 12 rebotes 3 asistencias y 36 de valoración.