Buen nivel de juego de ambos equipos, llegaron los Blazers a Colorado más descansados, y de la mano de Hood, Kanter y sobre todo, Lillard, no llegaron a salir del encuentro. Pero Denver fue siempre un paso por delante, su tándem Murray-Jokic firmó 60 puntos con el serbio especialmente inspirado en la anotación.
Ciertos matices dejan abierto el segundo encuentro, pero de momento se ha visto a los Nuggets más cómodos y fieles a su estilo que ante los Spurs… mucho que ver con la calidad defensiva del backcourt de los Spurs (que son en esencia defensores) frente al de los Blazers (pistoleros).
Portland (0) 113-121 (1) Denver
Duelo bonito entre dos equipos que hacen un baloncesto vistoso, y que tienen a sus dos estrellas en un momento muy bueno. Partido absolutamente igualado durante la primera mitad y los instantes iniciales de la segunda parte, hasta que Denver comenzó a manejar ventajas exiguas, pero constantes. Los dos equipos lanzaron por encima del 50% en tiros, y Kanter (26 puntos, 7 rebotes y 11 de 14 en tiros) se sumaba a un gran Lillard (39 puntos 12 de 21) para mantener el pulso. Millsap daba el contrapunto a Kanter en la primera mitad con 17 tantos, aunque se quedó estancado en la segunda parte, los banquillos anotaban cada uno 28 puntos, con Rodney Hood anotando más (17) que en casi toda la primera ronda. No hay mucho que contar en torno a qué fallaba y qué acierto era más determinante hasta los minutos finales, Denver ganaba de 13, pero Lillard hizo su aparición recortando la ventaja…hasta que se le acabó la inspiración, o directamente le cerraron la puerta, o simplemente fue contestado por los Nuggets. Ahí, apareció más veces Jamal Murray que McCollum (que maquillaría sus puntos, pero no su serie, en el último minuto) y Lillard (4 de 12) falló los triples decisivos… eso sí, con los Nuggets siempre manejando esas rentas de las que hemos hablado. Jokic, magistral, esta vez anotando más que dirigiendo, pero mandando de manera absoluta en el campo.
El dato: Lillard y McCollum terminaron con 6 de 19 en tiros de tres. Por ahí debería llegar la mejora de los Blazers.
La clave: Denver manejó cierta ventaja en la segunda mitad, el estirón en el cuarto decisivo llegó de la mano del acierto en ataque, ambos equipos intercambiaron golpes con diferente suerte. Cuando Portland se puso a 5, 6 puntos seguidos de Plumlee y Jokic devolvieron el colchón. Tan sólo dos veces en todo el cuarto pudo Portland anotar en posesiones consecutivas sin que Denver respondiese.
MVP. Nikola Jokic. 11 de 18 en tiros y 12 de 12 en tiros libres. 37 puntos 9 rebotes 6 asistencias 3 robos y 2 tapones… Metió la mano en defensa con acierto, encontró el aro con facilidad desde todas las posiciones (3 de 5 en triples) y no tembló en los tiros libres. El faro de su equipo, respondió a cada intento de lucha de los Blazers.