El nuevo año arroja un cambio sustancial en lo más alto de nuestra Liga. Con el Real Madrid constituido en un líder muy sólido, el Sevilla se convierte en su más inmediato perseguidor después de su festín goleador del sábado en Anoeta y del empate del Barcelona contra el Villarreal, que cae a la zona de Europa League a costa del Atlético, otra vez en Champions tras ganar al Eibar. Por abajo siguen los tres mismos equipos de siempre. Todos están un punto más lejos de la salvación tras el empate en la final de locos que jugaron este lunes los rojillos contra el Valencia.
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Resultados de la 17ª jornada: manita del Madrid, goleada del Sevilla en el campo de la Real, empate entre Villarreal y Barça, victoria del Atlético en Ipurúa, tablas de Osasuna y Valencia y derrota del Sporting en Las Palmas.
El Real Madrid no tuvo piedad del penúltimo clasificado e inauguró el año liguero con una manita (5-0) que confirma el gran momento que vive el flamante líder y campeón del mundo, que en la matinal del sábado tributó precisamente un homenaje de oro a su estrella, Cristiano Ronaldo. Los blancos igualaron el récord del Barcelona (39 partidos consecutivos invictos) y, con un partido menos, aventajan en cuatro y cinco puntos a sus dos perseguidores. El Sevilla es el más inmediato tras su goleada en Anoeta (0-4), un gran resultado para corroborar el gran momento que también viven los de Sampaoli, que suma esta temporada un punto menos (36) de los que sumaba Juande Ramos (37) hace una década en el mejor registro en las 17 primeras jornadas de toda la historia sevillista, y el sábado llegó además a las 250 victorias como visitante.
El Barcelona se fue con un punto (1-1) del nuevo Estadio de La Cerámica, y gracias a una genialidad de Messi, en un partido marcado por otra polémica actuación arbitral, que dejó sin señalar un claro penalti por mano de Bruno en el área de Villarreal. El arbitraje de Iglesias Villanueva desató la ira del barcelonismo, con Gerard Piqué a la cabeza, que apuntó directamente al palco donde se encontraba el presidente de La Liga, Javier Tebas, para recriminarle lo ocurrido en el terreno de juego al término del encuentro. Este empate provocó un seísmo en las primeras posiciones, sacando al Villarreal de la zona Champions en beneficio del Atlético de Madrid, que asciende al cuarto puesto tras vencer al Eibar (0-2) y ya es el equipo que ha dejado su puerta a cero en más partidos de esta Liga (9 veces, siete con Oblak y dos con Moyà).
El empate contra el Barcelona desplaza al Villarreal un puesto y un punto por debajo de la zona que da acceso a la Liga de Campeones, pero no ha perdido ninguno de los 5 partidos que ha jugado contra los seis primeros de la Liga y sigue siendo el equipo menos goleado del campeonato (12 goles). La Real Sociedad también pierde un puesto tras la goleada encajada el sábado ante el Sevilla, que logró la mayor goleada de la historia en el campo de la Real, aunque los de Eusebio se mantienen en los puestos de Europa League.
Tras el empate de este lunes (3-3) en el partidazo de locos que se jugó en El Sadar, el Valencia de Voro ya no está en puntaje de descenso, suma un punto más, pero no consigue despegarse del triunvirato de cola. Ahí sigue el Sporting de Gijón, que tampoco sale del pozo en el que lleva metido desde las primeras jornadas y se mantiene antepenúltimo por la derrota del sábado (1-0) en el estadio de Gran Canaria frente a Las Palmas, que le deja a un punto de la salvación. Solo han sumado los sportinguistas 5 puntos de los últimos 42 posibles y llevan una victoria, 2 empates y 13 derrotas en sus 16 últimos partidos. El penúltimo lugar lo sigue ocupando el Granada, ya a cuatro del cuarto por la cola, tras la manita encajada en el Bernabéu; el equipo de Alcaraz ha recibido 100 goles en sus 65 partidos de Primera. El colista vuelve a ser Osasuna una jornada más tras no pasar del empate en el debut de Vasiljevic como entrenador, aunque el partido deja muy buenas sensaciones entre los rojillos después de ser capaces de remontar hasta tres veces contra el Valencia.

Así está la clasificación: con un partido menos, el Madrid le saca cuatro puntos al Sevilla y cinco al Barça, que cae a la tercera posición, el Atlético de Madrid vuelve a estar entre los cuatro primeros, el Villarreal baja a la quinta plaza, la Real a la sexta y por abajo siguen los mismos, aunque todos un punto más lejos de la salvación.
La cara: Sevilla

El Sevilla consiguió el sábado su mayor goleada en el campo de la Real y llegó a las 250 victorias como visitante en Primera.
El dato comparativo es lapidario y lo dice todo: el Sevilla llevaba la temporada pasada, a estas mismas alturas de campeonato, 0 victorias y 13 goles fuera de casa; el de este año lleva 4 triunfos y 17 tantos a domicilio. Unas cifras elocuentes que demuestran no solo que el conjunto sevillista no ha perdido potencial tras la marcha de Unai Emery y muchos jugadores, sino que tiene más vocación ganadora y ofensiva. La pareja Sampaoli-Lillo tiene mucho que ver en estos indiscutibles registros. La atrevida y romántica apuesta de estos locos del fútbol está teniendo tan buenos resultados como el del sábado pasado en Anoeta (0-4), una goleada que pone de manifiesto que este Sevilla va muy en serio.
La goleada en Donosti llega además en un momento muy oportuno, justo después del traspiés en la Copa contra el Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Nada mejor que una solvente victoria como la lograda este sábado ante la Real Sociedad, en un partido perfecto de los sevillistas, para olvidar el mal trago copero y afrontar la vuelta en Nervión con las pilas bien cargadas en busca del milagro.
Ben Yedder, que firmó su segundo triplete como sevillista (el otro lo logró en la Copa), fue el gran protagonista de un triunfo brillante que completó Sarabia. Este 0-4 llegó, además, antes de recibir al líder la próxima semana en el Sánchez-Pizjuán, un partidazo por todo lo alto que dilucidará si el Sevilla de Sampaoli es el gran rival del Real Madrid por el título liguero.
La cruz: Osasuna y Valencia

Osasuna y Valencia firmaron un empate no apto para corazones débiles en el partido que cerró la jornada.
Angustias paralelas. Aunque podían ser la cruz de la jornada cualquiera de los cuatro equipos que ocupan las cuatro últimas posiciones, por estar empeñados en no alejarse del precipicio, la locura protagonizada por Osasuna y Valencia este lunes en El Sadar los convierte a ellos en las cruces de la jornada. Ambos siguen sin ganar (Osasuna no gana desde su triunfo del 17 de octubre contra el Eibar en Ipurúa, un día después de la última victoria liguera del Valencia contra el Sporting en Gijón) y el cambio de entrenador no se ha traducido en un resultado positivo para ninguno. Ni Vasiljevic ni Voro, en su enésima etapa en el banquillo valencianista, se pudieron estrenar sumando de tres y mucho tendrán que trabajar para evitar que sus conjuntos se caigan al pozo de Segunda (si es que ambos acaban la temporada sentados en dos sillas eléctricas como son los banquillos de estas escuadras). Uno por otro y la casa sin barrer. Ni los pamplonicas pueden dejar de ser colistas, ni los valencianos logran alejarse del peligro.
Lo de este lunes en Pamplona fue un duelo trepidante en el que el Valencia no se supo aprovechar de las tres veces que se adelantó en el marcador e incluso, con 2-3, falló un penalti pésimamente ejecutado por Parejo; mientras, Osasuna bastante tuvo con ser capaz de igualar el resultado por partida triple, aunque el rosario de ocasiones creadas por los rojillos y el derroche de casta que exhibieron, con un sublime Clerc, deja con muy buenas sensaciones a sus aficionados. Que no se descuiden ni los unos ni los otros, porque el colista visita la semana que viene al penúltimo en Los Cármenes en otra final angustiosa por lo bajo, mientras que el cuarto por la cola recibe en Mestalla al Espanyol de Quique, un viejo conocido que puede dar una estocada de muerte al proyecto de Peter Lim. Seguro que no se aburren en la matinal del próximo domingo en el coliseo valencianista.
Ante este panorama, y sin olvidarnos de la apuradísima situación que también padecen Granada y Sporting, más de uno ya da por hecho que Javier Clemente acabará sentado en el banquillo de alguno de los últimos clasificados y afrontarán con el de Barakaldo la angustiosa lucha por la permanencia. Sería lo que le faltaba a esta liga paralela. Un punto más de locura.
EL SACAPUNTAS
Diego Alves: «Hemos hecho un partido muy bueno»
Para disparar 22 veces a su portería, Osasuna solo marcó 3 goles. Igual por aquí se explica la frase del portero del Valencia.