Jornada muy goleadora la cuarta de liga. Hasta 42 goles vimos en los diez partidos disputados desde el viernes hasta el lunes. El derroche goleador sonríe especialmente al Barça, que tras su 0-5 al Levante sigue comandando la clasificación con indiscutible autoridad (12 de 12). Sin perderle el rebufo, con 10 puntos cada uno, llegan Valencia y Sevilla, dos equipos que ya se comienzan a dibujar como las principales alternativas al presumible binomio Barça-Madrid. Porque los blancos, aunque de momento sean séptimos, ya tienen a tiro de dos puntos el cuarto puesto que da billete para disputar la Champions y que ocupa con 8 puntos un Atlético venido a menos tras su derrota contra el Olympiacos y su empate en casa contra el Celta. El sorprendente Granada de Caparrós es el quinto clasificado empatado a puntos con el Atleti y se sitúa en posiciones de Europa League un punto por encima del Villarreal. Menos halagüeñas son las perspectivas por abajo: Espanyol y Córdoba empatan a dos puntos y abren una zona de descenso que ahora cierra el Levante, equipo atenazado por su apurada situación en la tabla y porque aún no ha podido celebrar ni un solo gol a favor. Pero que no se confíen unos ni se desesperen otros porque esto no para y este martes se inicia la quinta de Liga. La vorágine de la temporada ya funciona a pleno rendimiento, nos deja tiempo para jugar esta prórroga… y gracias.
A chicharrazo limpio
Andaba el Real Madrid renqueante tras las debacles en Anoeta y el derbi madrileño que la visita a Riazor se erigía en un delicado compromiso. Nada más lejos de la realidad. Un coloso con la pegada del Madrid tiró de su formidable pegada y le hizo un 8 al Dépor. Desde que CR se elevó al cielo de Riazor , donde nunca antes había marcado, los de Ancelotti se pasearon por el estadio coruñés, Cristiano marcó otros dos y completó un hat trick que le sitúa como el tercer jugador con más tripletes en Primera (20) tras Zarra y Di Stéfano (22 cada uno). También marcaron Bale (ya lleva 100 goles como profesional) , James (un golazo desde fuera del área que le convierte en el primer colombiano que marca en Riazor) y Chicharito, que se estrenó en nuestra liga con un zambombazo desde fuera del área. Una sinfonía interpretada a base de golazos que delata el potencial ofensivo del equipo de Ancelotti, pero Carletto y sus hombres -especialmente el portero- se lo tendrían que hacer mirar por su bien (han encajado 8 goles en 4 jornadas)
Luchismo
Si la pasada temporada fue la que consagró al cholismo como la doctrina de moda en el fútbol español, este curso parece que será el luchismo. El nuevo entrenador del Barcelona va camino de crear escuela y por los mensajes que recibe en su perfil en Twitter (los «te quiero míster» y derivados son enviados a todas horas a @luisenrique21), su credo cala en la afición. No es para menos. Su equipo marcha líder en solitario y a ritmo de récord: 12 puntos de 12 posibles, con 11 goles a favor y ninguno en contra, lo que le convierte en el primer entrenador en toda la historia del Barça que no ha recibido un gol en sus 4 primeros partidos de liga. Luis Enrique ha dejado en evidencia que se tiró a la basura la temporada pasada con el Tata Martino en el banquillo y ha demostrado que, después de la edad de oro que vivió el Barcelona con Guardiola y Tito Vilanova, él es el hombre adecuado para liderar la reconquista de la gloria. Personalidad, valentía, atrevimiento y conocimiento al servicio de una institución que quiere dejar atrás los líos administrativos y los ridículos deportivos sufridos antaño.
Una crisis con mucha «Duda»
Al contrario que a sus vecinos, al Espanyol le empiezan a entrar las urgencias. Solo ha sumado 2 puntos de 12 posibles y no son capaces de conseguir una victoria. Crisis en toda regla la que se vive en el conjunto perico y a la que el míster Sergio González no le ha sabido meter mano por el momento. Lo tuvo arreglado este sábado hasta el último instante, cuando Duda se sacó de la chistera un formidable lanzamiento de falta que superó a un impotente Casilla. Ni en su propio hogar de Cornellá-El Prat es capaz de ganar el Espanyol, un equipo al que el empate del sábado contra el Málaga le ha dejado sumido en una crisis con mucha «Duda».
Remontada «made in Marcelino»
Un entrenador demuestra su conocimiento, buena estrella y talento cuando juega a la ruleta de los cambios. Marcelino García Toral es de los que aciertan cuando le toca jugar esta partida y por algo es uno de los entrenadores más respetados de nuestro fútbol. El complicado partido que le planteó su colega Paco Jémez le puso a prueba y tuvo que remontar un 0-2. La fe y la intensidad que imprime Marcelino a sus equipos no permite que sus hombres bajen los brazos en ningún momento. Por eso recortó distancias Javi Espinosa antes del descanso y en el segundo tiempo llegaron otros tres goles basados en el valiente cambio que introdujo el entrenador asturiano: un delantero, Luciano Vietto, por un mediocentro, Espinosa, que además acababa de marcar. Eso es valentía y ojo clínico, llámenlo como quieran. El caso es que un gran descubrimiento del técnico del Submarino como es el delantero argentino respondió a la confianza del míster, marcó dos goles y completó una remontada «made in Marcelino» para que el Villarreal vuelva a ganar, algo que no sucedía desde la primera jornada.
¿La mejor liga del mundo?
¡Cómo nos gusta a los futboleros divagar sobre cuál es la mejor liga del mundo! Que si la inglesa, que si la española, que si la alemana… Desde luego que nuestro campeonato dista mucho de ser el paradigma del fútbol internacional por muchas cosas, pero todas ellas se resumen en una palabra: desequilibrios. De esta forma se explican goleadas de escándalo como la vista el sábado en Riazor (2-8) y el domingo en el Ciutat de Valencia (0-5). Quince goles en dos partidos que demuestran la desigualdad que preside una competición que, tras el paréntesis que protagonizó el Atleti el pasado curso, va camino de convertirse una vez más en un juego de tronos entre el Real Madrid y el Fútbol Club Barcelona. Madrid y Barça, Barça y Madrid, tanto monta monta tanto y al final los que lo pagan son los aficionados de conjuntos tan humildes como el Deportivo y el Levante que tienen que contemplar impotentes cómo aplastan un par de tanquetas a sus equipos. Repartir los ingresos de las televisiones de una forma más justa, y no la broma que tenemos ahora, podría ayudarnos a tener una competición en condiciones de una vez por todas. Ya tocaba hacer justicia con este crupier de los banquillos.
EL SACAPUNTAS
Simeone: «Ha sido nuestro mejor partido»
Pues para ser el mejor partido se escucharon pitos en su contra por meter a Raúl García por Griezzman. ¿Qué les pasa, doctor?