
Siete minutos de silencio del Vicente Calderón como símbolo de respeto en memoria de Luis Aragonés y en el minuto ocho, el de su dorsal, explosión de aplausos en el feudo colchonero acompañados de cánticos para la gran leyenda del Atlético de Madrid, que repitieron durante buena parte del partido, tras cada gol, y al final. Todo es poco para Luis.
El Atlético estaba en concordancia con el día y la importancia del partido y tenía el dominio del encuentro. Llegaba más y mejor al área de la Real Sociedad y en el primer cuarto de hora fue bien anulado un gol a Villa, que pese a ser jugada antireglamentaria no se impidió ver un buen detalle técnico del ‘Guaje’, que se marchó de Bravo y marcó a puerta vacía. Pese al control del Atlético, no llegaba el gol y eso crea una impaciencia, más teniendo en cuenta el gran rival que es la Real. Terminó llegando en los minutos finales del primer tiempo tras un robo de Insúa en tres cuartos de campo, que avanza varios metros, abre a la izquierda para Diego Costa, que apura línea de fondo y centra para David Villa, que remató como un 9 clásico en boca de gol marcando el primero. La peor noticia del primer tiempo fue la lesión del propio Villa, que tuvo que ser sustituido por Raúl García.
Empezó mejor el segundo tiempo la Real Sociedad. Trató de tener más el balón, con mayor criterio y profundidad y sobre todo llegando con peligro mediante jugadas a balón parado. Justo cuando parecía que mejor estaba la Real, pasado el ecuador de la segunda parte, el Atlético dio dos zarpazos con los que sentenció el partido. Primero, con un excepcional pase en profundidad de Raúl García para Diego Costa que no falló en el mano a mano ante Bravo para marcar el segundo. Dos minutos más tarde, saque de esquina botado por Koke para un Miranda que se imponía por alto y cabeceaba al fondo de las mallas para poner el tercero. Faltaba el gol de hijo pródigo. Diego Ribas, aquel que se fue sin quererlo con el convencimiento de que volvería, lo hizo. Firmó el viernes, llegó a Madrid el sábado, sin entrenar, entró en la convocatoria y saliendo desde el banquillo marcaba el cuarto gol del partido en una noche histórica en el Calderón.
Triunfo que sitúa al Atlético de Madrid como líder de la clasificación aventajando en tres puntos al Barcelona, que perdió en casa ante el Valencia, y al Real Madrid que empató en San Mamés. Igualados a puntos, por golaverage general, es segundo el cuadro de Martino. Por otra parte, la Real Sociedad conserva su sexta plaza, que da derecho a Europa y se encuentra a siete del cuarto puesto del Athletic, que marca la zona Champions.