España se proclama campeona de Europa por tercera vez en los últimos cuatro campeonatos. Podemos decir en voz alta que estamos a la altura de las míticas selecciones Yugoslava o Soviética; aquellos equipos que aún llegando mal acababan siendo campeonas. Una selección que ha crecido partido a partido y que levantó la cabeza ante Polonia. Al frente uno de los mejores jugadores de baloncesto DEL MUNDO, DE LA HISTORIA.
PAU GASOL.
Máximo anotador del campeonato. Referente absoluto en el ataque y la defensa españolas. Mejor jugador a sus 35 años. Digno de todos los elogios y objetivo de cada abucheo de la impotente afición gala. Dos veces máximo anotador, 2 veces MVP, único jugador en conseguir esto en el mismo año, dos veces. Y campeón con una selección en la que faltaban Abrines, Navarro, Rubio, Ibaka o Gasol. Podría seguir alabando sus virtudes hasta el infinito.
Lituania se llevó una plata en un partido en el que simplemente no les dejamos existir.
España 80-63 Lituania.
El partido previsto, el guión pre escrito. España se proclama campeona de Europa por tercera vez en 4 campeonatos.
España salió muy metida en el encuentro, consciente de que sacar a la limitada selección de Lituania (hay que tener en cuenta que 2 de sus mejores 3 jugadores no estaban en el campeonato) era clave. Y así ocurrió, desde los primeros parciales hasta el final del primer cuarto, con 19 a 8 para España. Puñetazo encima de la mesa. Por un lado España estaba haciendo su trabajo (atrás) a la perfección, y por otro Lituania era más consciente que nunca de sus limitaciones. Negar los balones interiores a Valanciunas y cerrar las opciones de poste bajo de Maciulis, por fuera, agresividad en los contactos para evitar las penetraciones, arriesgando con más sentido en las líneas de pase.
El segundo cuarto tuvo dos fases, una primera en la que España pareció a punto de romper el partido, y una fase final en la que se desperdició parte de la ventaja. Se concedieron 25 puntos, algo que no tendría constancia en el resto del encuentro, y se llegaba al descanso 41 a 33 arriba. Sólo estaba hecho la mitad del trabajo.
La segunda parte arrancaba con el incierto tercer cuarto, auténtico caballo de batalla de la selección en este campeonato. Sin embargo, de nuevo un enorme trabajo atrás nos permitía dominar el parcial 19 a 10, y dejar el partido medio muerto 60 a 41. La aportación desde el banco de Claver, determinante, mientras Pau seguía dominando el encuentro, como hiciese en cada uno de los partidos del campeonato.
Un inicio desafortunado de último cuarto daba vida al partido, pero no la suficiente, España seguía insuperable en defensa, y gota a gota torturaba a los Lituanos en ataque.
El marcador final refleja un 80 a 63 que hacía justicia a lo visto sobre la cancha. Ni tan brillantes en ataque, pero tan duros en defensa… Todos los jugadores saltaron a la cancha y Pau que había puesto el punto final al encuentro con un triplazo, recibía su homenaje de la parte amable de la grada.
Las estrella lituanas terminaban estrelladas, Valanciunas eliminado por faltas y con 10 puntos y 9 rebotes demasiado luchados. Maciulis bajó 8 puntos su aportación, anulado por cada uno de los pares a los que le tocaba enfrentarse, ya fuesen el liviano Rudy, el aplicado Claver o el durísimo Felipe.
Pau Gasol se coronaba como monarca del campeonato con otro partido brutal. Elegido además MVP y siendo máximo anotador. Circunstancia que por cierto sólo se había dado cinco veces en la historia, unaa de ellas obra del propio Pau Gasol, único en repetir méritos. A su lado Sergio Rodríguez, un premio más al resto de la selección que al propio base; Nando de Colo, referente galo en el campeonato y sobre todo en el bronce, y los dos mejores lituanos, Maciulis y Valanciunas, que han sacado una plata de dónde esperábamos un 6º puesto.