El Getafe venció por la mínima (1-0) a un Sevilla plagado de suplentes y con su mente en Turín.
El partido que se jugaba en el Coliseum solo interesaba a un equipo, sobre todo después del resultado de San Mamés, por eso no se entiende que Villarreal, Real Sociedad y Sevilla no hayan jugado a la misma hora esta jornada. Mucho empeño pero poco juego de un Getafe que no supo hincarle el diente al Sevilla hasta que Fazio se marchó del campo. En ese tiempo, los hispalenses sufrieron a balón parado y encajaron el gol en una acción de pasividad defensiva tremenda. Unos se ponen con 39 puntos, a un empate de la salvación, dependiendo de sí mismo. Otros, en tres días, se juegan un título en Turín.
El Sevilla ha ido a Getafe con la mente puesta en Turín, sobretodo, después de ver el empate de la Real Sociedad en San Mamés, que le valía para seguir siendo quintos aún perdiendo hoy como así ha sido. Emery alineó solo a Fazio entre los titulares habituales. El resto, suplentes y tres canteranos, Carlos Fernández, Moi y Cotán. Los hispalenses en ningún momento mostraron más intensidad de la cuenta, pues les valió con agazaparse y aguantar los pobres ataques de Getafe, el equipo que tenía la urgencia de ganar hoy. Realmente no lo pareció. Fazio se bastó para hacerse grande y parar cualquier intento de balón en profundidad de los azulones. Si el Getafe apareció poco, el Sevilla menos. El joven delantero del filial no cazó balones, Trochowski, Jairo y Marín, se asociaron poco, y cuando lo intentaban, fracasaban en su mayoría. La primera parte se resume en aburrimiento de unos y otros. Parecía que ninguno quería ganar. Al Sevilla le daba más bien igual, pero el Getafe se jugaba la vida.
En la segunda parte, todo empezó igual. Con el paso de los minutos el Sevilla se fue echando más atrás, sobre todo con el cambio de Fazio por Nico Pareja. El primero de los argentinos lo acaparaba todo, y sin él, el Getafe comenzó a aprovechar el balón parado. La más clara, llegó con un cabezazo al larguero, justo antes del gol. En una jugada de extrema relajación en la defensa del Sevilla, y un fallo garrafal de Javi Varas, Escudero le pegó desde fuera del área, batiendo al portero del Sevilla.
Eso fue lo único que tuvo el partido, que se acabó ahí. El Getafe no fue a más, el Sevilla mantuvo su línea de mente puesta en Turín desde el minuto 0 al 90. Y no hubo más. El partido tenía poco desde que el Sevilla se clasificó para la final de la Europa League y se supo el horario del encuentro. Emery, en su obligación por reservar titulares, se olvidó de este partido, y ya solo piensa en el trascendental encuentro que tiene el Sevilla con la historia el próximo miércoles. El Getafe, está a un solo punto de seguir otra temporada más en la primera división de España.