Otro podio completamente español, y ya van tres de cuatro.
Había ganado en Jérez y quería más. Viñales ganó en unas condiciones en las que no se siente demasiado cómodo. No en vano, el año pasado su mejor resultado en mojado fue un cuarto puesto y varias caídas.
Pero en Le Mans quería cambiar la historia. No llovió, la pista estaba seca y era necesario correr con cautela, pisar las líneas blancas está prohibido. En la salida muy pronto se puso Folger a tirar y se llevó con él a Rins y a Maverick. Un ritmo alto dejó a Salom sin opciones liderando el grupo que peleaba por la cuarta posición.
No había estrategias que no fueran dar el máximo. Viñales se puso primero y Folger se colaba cayendo hasta la cuarta posición. A partir de ahí el piloto de Jorge Martínez Aspar fue perdiendo tiempo y acabó fuera del podio. Salom y Rins lucharon en la distancia por la segunda plaza. El subcampeón de 2012 no llegó a meter rueda a Alex, que a su vez se resarció del mal resutado de Jérez.
Ganó Maverick con dos vueltas rápidas para acabar la carrera. No dio opciones a sus perseguidores y ahora ya saca 13 puntos a Salom y 29 a Rins. De las doce posiciones de podio, los españoles han subido a once de ellas.
El próximo Gran Premio será en Mugello a partir del 31 de mayo.