ENTREVISTA A JESÚS GALLEGO
Ex director de Carrusel Deportivo y actual presentador de Hora 25 Deportes
“No hay ningún país en el planeta que tenga la variedad periodística que tiene España”
“El deporte femenino está en el debe del periodismo deportivo porque venimos de una sociedad machista”
“Cuando yo llegué al periodismo, nadie era de un equipo”
“Me parece fundamental la interacción con los oyentes. Se había perdido en la radio y ahora se ha recuperado”
“No seguí en Carrusel Deportivo porque no llegamos a un acuerdo. Es un programa muy duro”

Jesús Gallego dirigió Carrusel Deportivo las dos últimas temporadas completas. Esta imagen corresponde a su estreno el 12 de agosto de 2014.
Alejandro Rozada
Tres años después de entrevistar en estas mismas instalaciones a José Antonio Ponseti, por aquel entonces copresentador de Carrusel Deportivo, volvemos a la sede de la SER para hablar con el que fue director y presentador de este mismo programa hasta el pasado verano. El actual conductor de Hora 25 Deportes, Jesús Gallego (Jaraicejo, 1968), se escapa un instante del trabajo que le absorbe y nos atiende en la cafetería para reflexionar sobre radio, periodismo, nuevas tecnologías, música y sobre la vida en general, al tiempo que apura un café y una botella de agua. Gallego no deja ni un segundo de pensar en el curro y aprovecha hasta las pausas para seguir reflexionando sobre su profesión y vocación. Como le gusta decir a nuestro protagonista en sus programas, “aquí Jesús Gallego, desde los estudios centrales de la Cadena SER en la Gran Vía de Madrid”.
– Como periodista que eres, estás más acostumbrado a hacer preguntas que a responderlas, aunque últimamente te pasas cada vez más tiempo respondiendo las de tus seguidores en Facebook Live y Periscope. ¿Cómo te encuentras en ese papel?
- Realmente es una nueva vía de comunicación y yo creo que forma parte de las redes sociales. Normalmente las hemos conocido escribiendo 140 caracteres en Twitter o algo más en Facebook. Esto es una nueva evolución y creo que hay que adaptarse. Es una manera atractiva de que la gente te pueda ver de una forma individualizada en su ordenador, móvil o tablet. Yo me encuentro bien, pero en realidad lo más importante que tienen estas dos herramientas es la naturalidad, porque un estudio de televisión es más riguroso por la iluminación y demás, la información es más completa. Esto es un contacto mucho más directo con quien realiza la entrevista y además con la ventaja de que puedes preguntar y ser contestado en tiempo real. Me gusta. Lo estamos haciendo todos los martes a las seis de la tarde.
– ¿Eres consciente de que ese formato de las retransmisiones semanales por Facebook y Periscope es trasladable a la antena tal cual, simplemente incluyendo un micrófono junto a los móviles, para dar forma a una sección e incluso a un programa de radio?
- Realmente, sí. Es una charla. Estamos acostumbrados a que en una hora de radio haya muchas más cosas que, simplemente, un tío largando una hora. Esto del Facebook y Periscope es un tío leyendo preguntas y contestando a esas misma preguntas. Pero sí, es un contenido más.
“La entrevista por Facebook y Periscope es una herramienta que está creciendo y es bueno darle periodicidad y regularidad”
– Es una interacción continua, más directa y más profunda aún que las píldoras puntuales que podéis soltar en el SER Deportivos, Carrusel y Hora 25 Deportes. Esto es un diálogo.
- Esto es un contacto directo y absoluto. Y todavía no está desarrollado porque, como lo estás haciendo con el teléfono o la tablet, hay muchas preguntas que se van sin respuesta. A veces vas a contestar una pregunta y ya ha saltado porque te han entrado tres nuevas. Ahora es difícil; mejorado será todavía mucho más atractivo y mucho más completo.
– Va a tener razón Paco González cuando me dijo que, si se te mete una cosa en la cabeza, aunque solo creas tú en eso, te acaba saliendo. Véanse tus Facebook Live y Periscope. Esto no se lo he visto a ningún periodista. Los demás lo pueden hacer puntualmente.
- Es una herramienta que está empezando ahora, está creciendo y es bueno darle esa periodicidad y regularidad. Si lo haces esporádicamente vas a tener conexiones, pero como no lo has anunciado ni la gente se ha acostumbrado, serán esporádicas. Si mantienes una regularidad y citas a la gente los martes a las seis de la tarde, el que haya ido una vez ya sabe que los martes a las seis de la tarde está esa opción. Yo creo que crecerá.
– La interacción con los oyentes no te pilla de nuevas. En tus programas siempre has tenido un contacto permanente con la audiencia.
- En SER Deportivos fue donde empezamos de verdad a darle paso a los oyentes con el contestador telefónico, que parecía una cosa súper vieja pero conseguimos una fidelidad y una cantera de comentaristas muy buena. De ahí salieron míticos como «el antimessina», «el de la lumbre», «el chusco», «la señora Carmen»… A eso se añadieron los sonidos de WhatsApp y ahora el Facebook Live. Todo va creciendo. A mí me parece fundamental la interacción con los oyentes. Se había perdido en la radio y ahora se ha recuperado.
– Así conseguisteis tener un sonido propio en Carrusel Deportivo y alejaros de lo que siempre había sido el programa. Tu Carrusel no tenía nada que ver con el de Paco y Pepe, pero tampoco con el de Carreño y Ponseti. Era algo completamente nuevo.
- El espíritu del Carrusel de las dos últimas temporadas era SER Deportivos. Yo había hecho durante cinco años SER Deportivos, que fue un programa que realmente cambió la manera de hacer los programas locales de las tres de la tarde. Dimos un paso a lo global, podíamos hablar de Fórmula 1, NBA o tenis, cuando antes solamente se hablaba de los entrenamientos de Real Madrid, Atlético de Madrid y Rayo Vallecano. Nosotros lo abrimos mucho más, a la gente le gustó y ese lenguaje lo llevamos a Carrusel: el contestador, la música, las imitaciones de Raúl… Trasladé al Carrusel todo lo que había sido SER Deportivos. Pero Carrusel dura ocho horas y es un formato muy difícil de continuar con un ritmo, una tensión, unos contenidos interesantes y una intensidad total. Eso es muy complicado mantenerlo, pero creo que lo conseguimos y el programa era un buen producto.
– Consigues evolucionarlo, quitarle ruido, añadirle muchísima más música de la que había, anteponer la narración y los comentarios en los momentos más emocionantes, mucha interacción con la gente… ¿Te dio tiempo a todo eso en dos temporadas?
- Yo creo que sí lo hicimos. Desde el principio, el programa tuvo un sello, lo ha mantenido y la gente se acostumbró. Al principio, por ejemplo, cuando en Carrusel había una narración de un partido, yo le decía al técnico que pusiera de fondo a los Black Kids y subiera la música, él me decía «¿Cómo vamos a subir la música si estamos narrando?», y yo le respondía que daba igual. «Pero si lo importante es la narración del partido», me replicaba. En algunos momentos sí, en otros no. En otros momentos, la música hacía mejor esa hora de radio. Cuando yo hacía Carrusel, el programa se pensaba en global, pero había que hacer una hora de radio buena, sea cual sea, y para hacerla no se puede narrar a secas un Granada-Osasuna, porque hay gente en otras ciudades a los que no les interesa ese partido. Tienes que hacer que, en esas dos horas, tenga algo más la radio para que a esa gente les interese. ¿Como lo haces? Poniendo música, humor, tensión, metiendo oyentes… Eso es lo que yo intenté hacer en el Carrusel.
“El espíritu de mi Carrusel era SER Deportivos”
– Lógicamente te tengo que hacer la pregunta del millón: ¿Por qué no seguiste en Carrusel Deportivo? Mucha gente te echa de menos.
- Porque no llegamos a un acuerdo. Es un programa muy duro. Son ocho horas los sábados y los domingos (16 horas). Mi contrato terminaba, puse una serie de exigencias para continuar, estuvimos hablando, no llegamos a un acuerdo y se tomó la decisión de ir por otro sitio.
– ¿Por ti hubieses seguido?
- Sí, yo tenía un proyecto a largo plazo, pero sabía la dureza, el reto del programa y lo que me iba a exigir. Eso necesitaba unas condiciones que no vi.
– Te enlazo eso con los recientes datos del EGM. Sin entrar al detalle, Carrusel Deportivo bajó respecto a la última ola contigo al frente del programa. ¿Cómo lo ves?
- Los EGM hay que relativizarlos siempre. Y los EGM puntuales no dan una realidad exhaustiva de lo que sucede. Hay que mirarlos en perspectiva y cuando van dos o tres se marca una tendencia. Un ejemplo: los seis EGM que tuvimos conmigo en Carrusel hubo picos, subidas y bajadas, pero en el cómputo global de los seis hubo una subida del 20 por ciento. Eso es lo que vale. Cuando llevas tres, es cuando se ve.
– Y esa subida además coincide con la fuerte competencia de Tiempo de Juego. Aún así, mantuviste líder a Carrusel. Tiene mérito.
- Tiempo de Juego hace un buen producto y también crecerá como nosotros. Esto es cuestión de hacer un buen producto y de que la audiencia vaya identificándose con ese producto. En la radio, nadie cambia un día de un dial a otro y se queda ya. La radio es un medio de costumbres. Tú estás acostumbrado a una cosa y la escuchas porque te gusta; para irte a otro sitio, o para cambiar o para descubrir, tienes que escuchar algo que lo escuchas dos veces y las dos veces que lo has escuchado, te ha gustado mucho; entonces, la siguiente volverás porque lo que has escuchado te ha gustado. Para conseguir eso tienes que convencer a los oyentes nuevos de que el producto es bueno. Hay que hacer un buen producto, convencer a la gente y que se identifiquen con lo que haces.
– En el último EGM contigo en Carrusel Deportivo, se pasaba de una situación casi de empate técnico los sábados a que Carrusel se disparase los domingos. Eso también tiene un singular mérito porque te enfrentabas a Tiempo de Juego, que son los que antes habían trabajado contigo. La SER contra la SER.
- El mercado periodístico es así. Las cosas cambian. Hoy estás aquí, luego estás allí, ahora está De la Morena en Onda Cero… Está bien que haya movimiento.
“En el cómputo global de los seis EGM de mi Carrusel hubo una subida del 20 por ciento”
– Te sustituyeron por Dani Garrido, que era tu ayudante y sustituto en Carrusel. ¿Qué os dijisteis cuando se confirmó el intercambio de papeles?
- Nos deseamos mucha suerte y nos dimos muchos ánimos porque yo era consciente de lo duro que es el formato. Estar encerrado sábados y domingos durante todo el año, cuando la gente hace su vida y demás, mientras tú estás ocho horas metido entre cuatro paredes, es duro. Con lo cual, le dije eso: ánimo, suerte y creo que lo está haciendo bien.
– Ahora has pasado a Hora 25 Deportes. ¿Qué te permite ese programa que no te permitía Carrusel, y viceversa?
- Me permite poco porque tengo solamente media hora. Yo estoy intentando en Hora 25 Deportes, que desde siempre era de cincuenta conexiones rápidas y noticias en toda España, tratar los cinco temas fundamentales en esa media hora que tenemos. Hay noticias que no tienen la relevancia suficiente para ocupar un minuto de ese programa. Realmente hay siete u ocho noticias en un día que son de verdad actualidad, hay que darlas: partidos en directo y la actualidad de los grandes partidos de la jornada. Después me gusta meter un poco de opinión y que no quede aturullado de datos. Prefiero dar las seis noticias buenas que hay y dar paso a comentaristas de la SER, que aportan su opinión en esa media hora, y creo que también es importante.
– Es un informativo, pero va un poco más allá de lo que es un informativo de conexiones aquí y allá. Tiene más análisis.
- Las noticias ya las conoce todo el mundo. Hoy, con las redes sociales, las noticias se producen y al instante las sabe casi todo el mundo. Desde por la mañana se saben las cosas, pocas noticias hay que surjan a las siete u ocho de la tarde. Ahí tiene cabida un poco de análisis. A mí me gusta meter a Relaño, Romero, Jordi Martí, Álvaro Benito… Los viernes hacemos una sección que se llama «El escáner» donde juntamos a dos comentaristas de la SER y miramos a cinco partidos de Liga (el del Madrid, Barça, Atleti, otros que haya importantes) y en cinco minutos dan su opinión sobre lo importante de la jornada. Exprimimos la importancia de la jornada en cinco minutos, lo montamos con efectos, música y queda de puta madre.
“Hoy, con las redes sociales, las noticias se producen y al instante las sabe casi todo el mundo”
– Volvamos al Carrusel de Garrido: ¿Qué opinas? Ha respetado bastante tu herencia.
- Él ha intentado seguir el camino que marcamos nosotros. Una de las cosas que hice yo fue ordenar mucho el programa y él lo mantiene. Nueve horas de desorden son al final muy duras. Él mantiene la línea, con los mismos comentaristas, ha cambiado al árbitro entre otras cosas, pero hace prácticamente lo mismo.
– Te tocó hacer Carrusel para sustituir a Paco González en el final de la Liga 2009-10 y el Mundial de Sudáfrica, y en 2014 después de la etapa de Carreño y Ponseti. ¿Vas a volver algún día o es una etapa cerrada?
– No lo creo. Lo he dejado hace unos meses. Lo hice porque fue la SER la que me buscó y me pidió que lo hiciera. Le di mi sello, la particularidad que tenía, hice un producto bueno y ahí queda.
– Dos grandes novedades de tu Carrusel. Por un lado, Raúl Pérez, una figura clave con protagonismo de principio a fin contigo en la mesa. Siempre existió la figura del animador, ¿pero qué aportó Raúl que no se hubiese aportado antes?
- Raúl aportaba diversión, ironía y era un personaje más del programa. El hecho de que estuviera presente en los partidos, los hacía más divertidos. No es solamente el hecho de hacer un día un sketch de una canción o lo que sea otro día. Los guiones del sesenta por ciento de las imitaciones los escribía yo y él hacía el cuarenta por ciento. Yo era el que más lo hacía y esa es una ventaja, porque como yo llevaba el programa sabía cuál era el momento. Yo preparaba lo que se estaba hablando y sabía perfectamente qué sketch iba en ese momento para que viniese al caso de lo que estábamos hablando. Esa ventaja e interacción que tenía con Raúl, que llevamos ya bastantes años haciéndola en SER Deportivos, hacía crecer al programa. Tanto si estaba en directo como grabado previamente. Como yo le había escrito el guión, yo sabía cómo darle paso. Fue algo nuevo, porque no se había hecho en ningún carrusel hasta entonces, y hacía más divertidas las transmisiones.
– Otro cambio significativo fueron los prescriptores, y no la figura clásica del animador como Pepe Domingo Castaño o Juanma Ortega. Se incorporaron Ochoa, Coll y Prat. ¿Qué pretendíais con ese cambio?
- Cuando cogí el programa, pensé que la figura del animador ya estaba demasiado usada. Los animadores habían seguido mucho los tópicos de Pepe Domingo Castaño, que lo había petado. Intentar hacer una copia de algo que ha triunfado mucho es muy difícil. Si no haces algo nuevo e intentas hacer un programa de radio como alguien que lo ha hecho durante muchos años triunfando, no te vas a comer «una mierda». El original es el original y las copias siempre van a ser copias. Yo no quería un animador que dijera «vamos a cantar», porque para eso estaba Raúl Pérez. Quién puede hacer algo hilarante y súper divertido era Raúl. Nosotros cantábamos con Florentino, Cholo Simeone, Rajoy, Iniesta… Los animadores no tenían por qué hacer toda la publicidad como «Pepe un purito»; la hacían bien, correcta, contundente y como tiene que sonar en la radio. Yo prefería que Ochoa y Coll lo hicieran de esa manera.
“Yo no quería en mi Carrusel a un animador que cantara porque para eso estaba Raúl Pérez”
– Los narradores tenían una importancia prioritaria. Romero, Flaqui, Condés, Morata, Fran Guaita, Markínez, Ortega, Pacojo… ¿Un papel igual o más destacado que el que habían tenido antes?
- No lo sé. El Carrusel tiene que tener una premisa, aparte del humor, la música, el ritmo… Era la emoción y los encargados de darla son los narradores cuando los partidos se prestan a ello. Hay partidos que no son emocionantes y el narrador pierde presencia. No es lo mismo narrar un 6-0 que un 0-0 con la emoción ahí. Yo les hice ver a ellos que hay momentos en los que tienen que estar en primer plano porque son los que transmiten la emoción de ese momento del programa, pero hay momentos que tienen que estar en segundo plano porque donde están ellos no está pasando nada emocionante, ni siquiera noticiable. Creo que los narradores en el Carrusel tienen su momento.
– El papel de los narradores está a su vez muy supeditado al de los comentaristas: Álvaro Benito con el Madrid, Luis Suárez con el Barça, Rubén Uría con el Atlético de Madrid, Julen Guerrero con el Athletic de Bilbao… Conseguiste formar un bloque alternativo a la hegemonía del grupo de Paco, Lama y todos sus comentaristas.
- Fichamos a Álvaro Benito porque era amigo de él desde que yo era reportero del Madrid y él jugador. Me parece que aporta una frescura y una juventud al discurso futbolístico buenísima. Aquí querían un comentarista del Barça y querían fichar a ex jugadores. Yo conocía a Luis Suárez de cuando estuve en Deportes Cuatro, de un par de cosas que hicimos, y me encantó su retranca y sus chascarrillos. Al Barça le dio una ironía que no tienen otros comentaristas. Hicimos un buen grupo, yo creo que permanece todavía y ahí queda.
– Te conseguiste salir del carril en un programa que está condicionado al directo y se hace casi sin guión.
- Eso es un error. Cuando hay cinco partidos a la vez, el Carrusel se hace prácticamente solo: goles, jugadas polémicas, faltas y es un no parar. Pero cuando se está jugando un partido solo, donde juega un equipo que está en mitad de la tabla con otro que también está en esa zona, en esas dos horas que solo tienes eso y algún partido de Segunda más. Tienes que llenar dos horas y lo que hice fue instaurar que, desde los martes, yo pensaba en el Carrusel del fin de semana. Martes, miércoles y jueves preparaba cosas para el programa: desde sketchs de Raúl a montajes musicales. Porque eso hay que llenarlo. En el Carrusel de Paco, cuando yo hacía el inalámbrico del Real Madrid y la selección, casi siempre había tres partidos jugándose a la vez como mínimo. Había un partido de la jornada, que era el que predominaba, pero aparte había otros tres de Primera, cuatro de Segunda… y era mucho más atropellado. Eran de cinco a nueve o de cinco a diez de la noche como mucho; ahora son ocho horas en las que se juegan tres partidos. Tienes que llenar ocho horas de radio con tres partidos y tienes que currártelo mucho.
“Para jugar con la música hay que conocerla”
– En el vídeo del disco de Carrusel Deportivo que sacasteis hace unos años y que precisamente coordinaste tú, Paco González te decía que a él no le gustaba toda la música que sonaba en su programa y reconocía que metían canciones horteras de esas que le gustan a la gente y están relacionadas con el fútbol. Hay un montón de canciones que a él le gustan, pero no las mete en su programa para que no se venga ni muy arriba ni muy abajo; simplemente ellos le intentan dar una vuelta cada año a las sintonías. Ese planteamiento difiere del tuyo.
- Carrusel siempre ha tenido música. Antonio Martín Valbuena ya ponía buena música y Paco González también ponía buenos temas. Quizás no tenía el sentido musical que puedo tener yo, que estoy muy zumbado, pero en los últimos años de Paco aquí, yo entraba los sábados y ponía dos canciones que luego sonaban otros días. Empezamos a abrir una brecha que con naturalidad luego ha llegado donde ha llegado. Yo utilizo mucho la música para elevar momentos de bajón, para subirlos. Para conseguir eso tienes que conocer las canciones. Para jugar con la música, hay que conocerla. Cuanta más conoces, más herramientas tienes para utilizar.
– Se puede decir que tu Carrusel fue un carrusel de autor, muy tuyo, completamente distinto a lo que se había hecho antes. Coral, pero sobre todo personal.
- Sí, tenía una dirección más marcada.
– Incluso prescindiste de la mítica primera hora, que te hubiese venido bien para rellenar ante algunos partidos con poco tirón.
- No. Es que yo lucho en la radio contra el relleno.
“Yo lucho en la radio contra el relleno”
– Pero la primera hora no es un relleno, es un programa aparte dentro de un programa. Antes en Carrusel y ahora en Tiempo de Juego.
- En aquellos tiempos tenía más sentido porque el partido empezaba a las seis y la primera hora era de cinco a seis, no había nada antes. Ahora los partidos empiezan a las cuatro de la tarde y puede ser el Madrid o el Barça. Ni siquiera la previa de esa primera hora está vacía. Porque en las previas de esos partidos hay que hablar de las alineaciones, los cambios y demás. ¿Cómo haces la primera hora?
– La primera hora no tiene por qué ser la primera. Es la hora cachonda y puede ir en cualquier momento de la tarde.
- Pero es que la hora cachonda tenía aquel sentido bueno cuando no había otra cosa durante esa hora. Si haces una hora cachonda y tienes que estar interrumpiendo las bromas porque hay una alineación, una entrevista, un protagonista o un gol, ya no es igual. En los últimos años, una vez que se fue Paco, aquí se hizo la primera hora y se convertía en cinco tíos que entraban a ver quién dice la tontería más grande. Aquella primera hora que hacíamos con Paquito, Maldini, Paniagua, Juanma Castaño, Hevia y luego aparecí yo con la música, era todo muy espontáneo. No espontáneo porque no estuviera preparado, sino porque era algo novedoso. Hablando todos de lo de todos, se meten unos con otros y son todo risas. Luego intentar imitarlo, haciendo otra primera hora y juntando a otros cinco tíos a ver quién dice la mayor barbaridad, era una copia.

Jesús Gallego con Raúl Pérez, Joaquín Prat y Juan Ochoa en el primer Carrusel de la temporada 2015-16.
– Tu Carrusel tuvo bastante interacción con los oyentes en las redes sociales. Sobre todo el día que comunicaste en Twitter que no ibas a seguir en Carrusel Deportivo. Pero todavía más retweets, «me gustas» y menciones tiene Tiempo de Juego normalmente. Debe de ser difícil competir contra eso.
- Primero creo que las redes sociales no reflejan del todo la realidad, porque hay un sector todavía muy importante de los oyentes de radio, que tienen de 35 años para arriba, que no son súper activos en Twitter. La gente más activa en las redes sociales es la gente joven, entre 15 y 30 años. Estamos hablando de un sector, pero no podemos olvidarnos de los otros. Evidentemente hay que moverse y hay que hacerlo bien. Ellos lo hicieron muy bien antes que aquí en la SER. Nosotros en Carrusel conseguimos bastantes fines de semana ser TT, que nunca se había conseguido. Antes de que yo llegara, Carrusel no había sido TT nunca. El primer año lo debimos de ser cuatro o cinco veces, y el segundo año lo fuimos otras cinco, seis o siete veces. Empezamos un movimiento de redes, que todavía lo conservan, un buen movimiento de redes, colgando memes, vines… Eso es lo que hace moverse a las redes. Y regalando cosas: botellas de vino, entradas para el BBK Live… Así conseguimos ser TT de vez en cuando. Yo estaba contento con el Carrusel en las redes.
– Lo principal que tiene Tiempo de Juego es que han conseguido que lo escuche gente que normalmente no escucha la radio.
- Es una costumbre. Esa gente lleva escuchando a Lama 25 años. Es una costumbre muy arraigada. Alguien que lleva 25 años escuchando el mismo programa de radio, no va a dejarlo nunca, aunque los otros lo hagan mejor. No lo va a cambiar. Solamente lo cambiaría si el producto que escuchabas, por un cambio de presentador o una nueva etapa, sea malo y no te guste, entonces te puedes cambiar. Si tú estás escuchando un producto, da la misma calidad, es bueno y mantiene las voces, no te vas a cambiar.
– En radio no es tan fácil el cambio como en la tele. No existe el zapping.
- Por eso. Para que alguien se cambie de radio tienes que defraudarle mucho. Si eres oyente de Paco González, Manolo Lama, Pepa Bueno, De la Morena o Ángels Barceló, desde hace diez años y siguen haciéndolo igual de bien, pues no te vas a cambiar.
“Para que alguien se cambie de radio tienes que defraudarle mucho”
– Lógicamente no vas a criticar el EGM, pero mójate: ¿Crees que tus compañeros de la Cope tienen más repercusión ahora o cuando estaban en la SER?
- Cuando estaban en la SER. En Carrusel tenían más repercusión porque tenían dos millones de oyentes, ahora tienen un millón y pico. Yo tuve más de un millón ochocientos, que es el mejor EGM de la SER desde hace cinco años. Mi ultimo EGM fue 1.820.000 (sábados) y 1.840.000 (domingos).
– ¿Sigues pensando que la salida de Paco González y su equipo permitió que emergiera gente muy buena en la redacción de deportes de la Cadena SER?
- Por supuesto. Eso pasa en todos los medios. Cuando se va gente, otros ocupan su lugar y hacen su trabajo. Pasa aquí, en Onda Cero cuando se fue Carlos Herrera y en cualquier otro sitio.
– Te lo pregunto porque algunos compañeros que eran muy importantes, como Hugo Condés y Edu Pidal, que eran el narrador e inalámbrico del Atlético de Madrid, se fueron a Onda Cero.
- Hugo Condés empezó a narrar el Atleti en Carrusel porque decidí yo que lo hiciera. Antes lo hacían José Ignacio Tornadijo o Pacojo. A mí me gustaba lo que había escuchado de él y dije que lo hiciera. Es muy bueno y ya está.
– ¿Fue una decisión tuya y no de De la Morena, que se llevó a Hugo Condés a Onda Cero?
- No. José Ramón no sabía ni quién era.
– Ahora Condés narra a la selección española en Onda Cero, en lugar de Alfredo Martínez.
- Claro, porque estuvo dos años haciéndolo en la SER y ha crecido exponencialmente. Yo sabía que lo hacía muy bien y donde ha crecido ha sido en Carrusel Deportivo.
– Sinceramente, Gallego, ¿para ti acertó De la Morena yéndose a Onda Cero?
- No lo sé. Eso es una decisión muy personal.
– ¿Te esperabas que se fuera?
- Sí y no. Por una parte no, porque aquí lo tenía todo, y por otra parte sí porque es una nueva ilusión para él. Llevaba mucho tiempo en el mismo sitio y es un reto difícil, como se está comprobando. Entiendo que económicamente era una oferta muchísimo mejor para él y la gente que se fue con él.
– Y ha vuelto a la SER Manu Carreño para hacer El Larguero. ¿En qué se diferencia su programa del de Joserra?
- El programa de autor por antonomasia es el de De la Morena. Yo estuve currando en El Larguero toda la vida y, aunque últimamente había cambiado mucho, era un programa marcado por el estilo del presentador. Era un estilo de mucho peso tanto en las entrevistas humanas como en la diversión, el cachondeo, la desdramatización de los temas… Un programa muy coral (antes, ahora ya es menos coral) y muy personal. Manu hace un programa más informativo: las noticias, los protagonistas, los comentaristas y lo que tiene que entrar. Lo que hay en el día, entra. De la Morena tenía una cosa que era él sobre todo, una cosa muy personal.
– Y por el otro lado está tu compañero, y sin embargo amigo, Juanma Castaño. ¿En qué se diferencia El Partidazo de El Larguero?
- El Partidazo no lo he escuchado mucho, pero Juanma lleva ya mucho tiempo en esto y tiene mucha experiencia tanto en la tele como en la radio. Ha hecho muchos mundiales, eurocopas, ha trabajado con De la Morena, conmigo, con Paco González, con Manu Carreño y de todo eso tiene que haber aprendido. Y con tantas influencias es como se aprende. Como mejor se aprende en la radio es estando alrededor de la gente que hace buena radio. Tiene ahí un poso que va a salir seguro porque tiene gracia, retranca…
– Presentasteis juntos Ser Deportivos allá por 2008, coincidíais en la primera hora de Carrusel Deportivo y en Deportes Cuatro hace un par de años. ¿Volveréis a coincidir y a currar juntos?
- No lo sé. Espero que sí. Nos reíamos mucho en aquella etapa de SER Deportivos, nos descojonábamos y sonaba bien el programa
“Como mejor se aprende en la radio es estando alrededor de la gente que hace buena radio”
– Cuando te entrevisté hace unos años me dijiste que la radio deportiva nocturna no te daba las sorpresas que a ti te gustaría que te dieran, ¿ya te las da?
– Lo que te decía es que la radio nocturna ya no puede ser lo que era cuando nosotros la escuchábamos. Cuando yo tenía veinte años y escuchaba a García, o empezaba a escuchar a De la Morena, tú durante el día no tenías canales para enterarte de todo lo que pasaba. Cuando llegabas a las doce y ponías la radio, era cuando te enterabas de verdad de lo que había sucedido. Mientras que ahora es súper complicado con las teles, internet, mil canales, redes sociales, una radio 24 horas de deporte… A las doce de la noche, la actualidad llega trillada. Ya has visto los goles, ya has escuchado las entrevistas y demás. Esa capacidad de sorprender con algo es mucho más difícil. Pensar que vas a poner la radio a las doce y te van a sorprender con algo, antes ocurría en el ochenta por ciento de los días, ahora ocurre en el quince por ciento. Es muy difícil, muy complicado.
– ¿Te gustaría volver a hacer radio nocturna? Ya la hiciste en su día cuando te tocó sustituir a De la Morena.
- El horario que me gusta es éste que tengo ahora.
– Ofrecerías algo distinto, obviamente.
- Creo que si no ofreces algo distinto, te conviertes en otro producto más.
– Eres lo que en fútbol se conoce como un «one club man», toda la vida has estado en la SER, ¿te retirarás aquí?
- No lo sé, nunca se puede decir eso, las cosas dan muchas vueltas.
“Si no ofreces algo distinto, te conviertes en otro producto más”
– Y la vuelta a la tele. Ya has dicho muchas veces que te gustaría volver: ¿A un programa deportivo como Deportes Cuatro o a un magazine como Te Vas a Enterar?
- La verdad es que me atrae mucho hacer un magazine, algo nuevo que no haya hecho nunca. Hacer cosas nuevas supone aprender, mientras que si haces cosas que has hecho antes las puedes hacer mejor, peor o evolucionar, pero no aprendes. Cuando empecé en la tele en Te Vas a Enterar ha sido, sin duda, el programa en el que más he aprendido en menos tiempo. Dos horas de directo todos los días con una escaleta que se movía, sin cue, sin apuntes, sin guionistas, improvisación total y absoluta sobre temas súper importantes (el accidente del Alvia, la elección del nuevo Papa, la cárcel para Bárcenas). Fue una experiencia brutal. No ha habido ningún otro programa (ni Carrusel, ni El Larguero, ni SER Deportivos), en el que yo haya aprendido más de lo que aprendí durante un año en Te Vas a Enterar. Una cosa brutal, tremenda

Desde noviembre de 2012 a agosto de 2013, Jesús Gallego presentó el magazine «Te Vas a Enterar», de lunes a viernes, en Cuatro.
– Era un magazine muy político y allí empezó a aparecer, aunque ya salía en las mañanas de Cintora, un tal Pablo Iglesias.
- ¡Efectivamente! Pablo fue contertulio mío en Te Vas a Enterar.
– ¿Os consideráis los padres mediáticos de la criatura?
- ¡No! Eso emergió porque, en ese momento en España, el hartazgo por la corrupción y el inicio de la crisis llegó a la gente. En programas como Te Vas a Enterar, el de Cintora o Más Vale Tarde, que estaba empezando entonces y en mis dos últimos meses le ganamos en audiencia, eran algo nuevo que no salía en los telediarios y las tertulias, y por eso empezó a emerger. Toda esta gente que denunciaba y se enfrentaba al poder tenía cabida en esos sitios.
– Ahora eres tertuliano de Minuto 0. Diferencias con Deportes Cuatro. ¿Con qué te quedas?
- Son estilos diferentes. Yo tuve una cierta polémica en las redes sociales el año pasado cuando dije que el mejor periodismo deportivo del mundo se hace en España. Tenemos un espectro tan grande como no tienen en ningún otro sitio. La gente dice «aquí todo es mierda». Primero, a mí no me parece que haya nada que sea mierda, hay estilos diferentes y tienes la oportunidad de elegir el estilo que quieras elegir. ¿Te gusta una tertulia polémica? Tienes El Chiringuito, la mejor que hay seguro. ¿Te gusta un poco más blanda? Estudio Estadio. ¿Quieres un programa de calidad? Informe Robinson. ¿Quieres las imágenes y más tranquilidad? Minuto 0. ¿Quieres vídeos espectaculares con ritmo? Los Manolos. ¿Quieres un tío que te dé doctrina y encima te ponga buenas imágenes? Pedrerol. Puedes elegir. Si eres un infeliz que te dedicas a decir que todo es una mierda, a lo mejor el problema lo tienes tú en la cabeza. Si aquí lo que puedes hacer es elegir lo que quieras. Tienes cuatro programas nocturnos de deportes a las doce de la noche, tienes programas también a las ocho y media, tienes programas a las tres de la tarde. ¿Qué pasa? ¿No hay nada que te guste? Es imposible eso. El problema lo tienes tú. Aquí se hace el mejor periodismo seguro. No hay ningún país en el mundo que tenga la variedad que tiene España.
– Presumes de una buena relación con Josep Pedrerol, ¿no crees que es un personaje dañino para el oficio?
- No, no lo creo.
– ¿Con qué te quedas de Jugones y El Chiringuito? ¿Con su carga editorial?
- Yo lo decía hace poco. Soy muy fan de sus editoriales sin estar de acuerdo en muchos, pero es que no están hechos para estar de acuerdo con ellos. Tampoco estoy de acuerdo con otros que creen que el Madrid juega mejor con tres delanteros que con cuatro centrocampistas, y no por eso digo que sean unos inútiles. Ese es su estilo; es un estilo agresivo, denunciante, punzante y a mí me gusta. Hay días que me apetece verlo, lo veo, unos estoy de acuerdo y otros no. También me gustan los vídeos de Deportes Cuatro. Cada momento tiene su periodismo.
“A mí me gusta el estilo agresivo, denunciante y punzante de Pedrerol”
– Caemos en la rutina de fútbol, fútbol, fútbol, fútbol, fútbol… ¿Qué pasa con los otros deportes? ¿Solo se habla de ellos cuando hay Juegos Olímpicos?
- Pues es un error y hay que cambiarlo. Sinceramente, yo he intentado contribuir a eso. Ya desde que estaba en SER Deportivos empezamos a hablar de tenis, de Fórmula 1 o de la NBA. Yo recuerdo que cuando por primera vez metí una sección semanal de la NBA hace cuatro años con Daimiel, la gente decía «tío, pero si este programa solamente se escucha en Madrid y en la zona centro». Bueno, ¿y qué? Si en Madrid hay seis millones de personas, ¿no les gusta la NBA? ¿O tengo que darles el coñazo hablando de Cristiano Ronaldo y del Atleti del Cholo todo el rato? Fue un éxito y ahora es una sección que se repite permanentemente. Con lo cual, abrirse a otros deportes enriquece los programas, aunque pensemos que no.
– Y al deporte femenino. Tenemos grandes deportistas como Mireia Belmonte o las guerreras del balonmano. Se merecen más atención de la que tienen.
- Por supuesto. Eso está en el debe del periodismo deportivo. Siempre digo que nuestra sociedad viene de donde viene y venimos de una sociedad machista donde el deporte femenino ha sido algo casi marginal. En el año 1970 en España había colegios donde las chicas no hacían deporte; hacían deporte los chicos y las chicas ese rato jugaban a otra cosa. Nuestra cabeza está ordenada todavía de una manera machista y eso cuesta cambiarlo mucho tiempo (50-60 años, quizás). Bastante bien lo están haciendo las mujeres.
– Ese machismo que está instalado en la sociedad, acaba afectando al periodismo deportivo y, por lo tanto, acaba habiendo machismo también en el periodismo. ¿Cómo se puede erradicar?
- Eso lo debe erradicar la evolución de la sociedad. Todos los sectores tienen que contribuir a ello. Evidentemente, mis hijos ven la vida de una forma menos machista que la veía yo, que había sido educado por una generación anterior a la mía donde las mujeres estaban en la cocina y no hacían nada más. Esa concepción que tienes en la cabeza no se cambia de un día para otro, ni en diez ni en veinte años, se cambia en dos siglos. Eso tiene que ir parando lo mismo que ha ido progresando y vemos que, por ejemplo, hay una mujer presentando el informativo aquí por la mañana, tendremos que ver a mujeres presentando un programa de deportes en hora de máxima audiencia y tendremos que ver a mujeres llevándose el protagonismo en programas con más asiduidad que lo hacen ahora.
– Esta casa, la Cadena SER, es un ejemplo en ese sentido porque la directora de deportes es Laura Martínez, una mujer.
- Efectivamente. Es la única mujer que dirige una redacción de deportes en nuestro país. Un paso adelante.
– ¿Dónde nace este machismo?
- Nació en la dictadura franquista y en la guerra civil; cuando terminó se decía que las mujeres tenían que estar en casa haciendo la comida y en misa por las tardes. Eso duró desde los años cuarenta hasta 1975. Esos treinta años han marcado toda nuestra vida.
“Todos los sectores de la sociedad tienen que contribuir a erradicar el machismo”
– Hablando de los nuevos tiempos. Tú eres muy activo en internet y redes sociales, pero trabajas a su vez en un medio tradicional. ¿Pueden convivir en paz los medios tradicionales con los digitales?
- Sí, porque lo que tienen que hacer los medios tradicionales es adaptarse a lo digital. La SER lo está haciendo ya. Antes estábamos hablando de que yo hago todos los martes un Facebook Live y un Periscope, eso es digital. Yo escribo semanalmente dos o tres artículos, los que me obligo a hacer, para la página web de la SER. Eso es digital, no es radio. Los medios convencionales tienen que adaptarse a lo digital. No les queda otra opción. Y especialmente la radio puede convivir muy bien con el medio digital, le va a venir bien porque va a permitir hacer una radio a la carta en la que tú vayas en tu coche y elijas el momento que quieres escuchar del programa que quieres escuchar y no te vas a tener que atener a la programación convencional, sino que vas a elegir tú el contenido.
– ¿En tu caso te quedas con los medios tradicionales por encima de los dignórales?
- No, es una evolución lógica. Hay una generación en nuestro país, que cada vez son más porque se ha alargado la esperanza de vida, una serie de gente que tiene entre 45 y 85 años, que ha conocido una radio, la de onda hertziana y nada más; esos no van a conocer la otra, algunos que se adapten sí, pero otros no. Luego hay otra generación que tiene que conocer la radio, la Cadena SER digital que sale en mi móvil a través de la aplicación y tengo contenidos, descargas, vídeos, podcast y un montón de cosas. Hay que adaptarse y es lo que harán las nuevas generaciones.
– ¿No crees que los nuevos medios digitales están incurriendo en los mismos vicios y las mismas prácticas que los tradicionales, pero con la diferencia de que solo operan en internet? ¿Han innovado? ¿En qué se diferencia cadenaser.com de publico.es o eldiario.es? ¿Solo en contenidos y enfoques editoriales?
- En muy poco. Hay que tener en cuenta que los medios digitales están naciendo, aunque parezca que llevan mucho tiempo, y los contenidos hay que inventárselos. La radio nació a principios del siglo XX y con el tiempo fueron apareciendo formatos y programas que antes no existían porque alguien se los inventaba, en los medios digitales tiene que suceder lo mismo. Si miras lo que hay ahora en la página web de la Cadena SER comparado con lo que había hace diez años, te vas a dar cuenta que se han hecho muchas cosas nuevas, pero dentro de diez años tendrá que haber otras muchas cosas más. Si algo tienen los medios digitales a diferencia de los convencionales, es que los cambios van mucho más rápido porque el formato se está desarrollando tan rápido que permite una evolución mucho más rápida. La técnica de la radio era la misma en 1960 que en 2010: alguien hablando, música, sonidos pregrabados y ya está. En lo digital, hemos pasado de 140 caracteres a entrevistas en directo en un año. Va a haber muchos cambios.
“En los medios digitales, a diferencia de los convencionales, los cambios van mucho más rápido”
– Al final en redes sociales se acaba hablando de que Manolo Lama no siguió en Deportes Cuatro. ¿Qué pasó ahí? ¿Por que no siguió? ¿Volverá?
- Fue raro y sorprendente. Y no te puedo dar ninguna pista.
– Me dijiste en la misma entrevista de hace unos años que Lama te había enseñado a sobrevivir y a buscarte la vida en este mundillo. Coincidisteis recientemente en Deportes Cuatro y durante muchos años cubristeis juntos al Real Madrid y la selección española. ¿Qué recuerdas de aquella época?
- Eso es historia del periodismo. Sin duda alguna es la etapa más importante del periodismo deportivo radiofónico. Eran tiempos donde los periodistas podían estar en todos los sitios: en el vestuario del árbitro, de los equipos haciendo entrevistas, al lado de los banquillos, en los aviones, en los hoteles, en las concentraciones… Ahora ese contacto se ha perdido, con lo cual el reporterismo casi ha muerto. Yo compartí unas experiencias brutales con Lama, recorriendo todo el mundo con él y aprendiendo. Lo que más he hecho con Lama es aprender.
“Ahora el contacto con los protagonistas se ha perdido y el reporterismo casi ha muerto”
– Esa época pasó a la historia por el enfrentamiento con Javier Clemente. ¿Llegasteis a las manos de verdad?
- No llegamos a las manos. Todo sucedió en la Eurocopa de Inglaterra de 1996. Antes de cada partido había un entrenamiento a puerta cerrada en el que no podía entrar la prensa y él ensayaba el equipo del día siguiente. Yo, a través de un contacto, conseguía meterme al campo y ver los entrenamientos. Cuando terminaba el entrenamiento, yo iba a la rueda de prensa y le preguntaba directamente «por qué mañana juega Caminero de lateral y no Fulanito». A él se lo llevaban los demonios, no lo entendía, hubo caza de brujas, preguntando jugador por jugador si me lo había dicho… Esa tensión pudo con él. Llevábamos mucho tiempo en la Cadena SER criticándole por sus formas, que eran lamentables; el ninguneo que tenía con la prensa, porque como él estaba apoyado por García a los demás los humillaba y la mayoría aguantaba la humillación, nosotros no… Y después de ganar el tercer partido de la Eurocopa, yo estaba hablando con Guillermo Amor, que había metido el gol, y cuando él pasó a mi lado, le dio en la mano y le dijo: «No hables con estos hijos de puta de la SER». Entonces, yo estaba en tensión, nos insultamos, nos encaramos, nos separaron los guardias de seguridad y ese fue el incidente.
– ¿Está pasado de moda ese estilo o sigue vigente? Ahí está la rajada de Abelardo de hace unos días.
- Es una desgracia que, en el año en el que estamos, un entrenador de Primera División se exprese así en un lugar público. El fútbol tiene todavía mucha más trascendencia que entonces. Habrán visto miles de niños al entrenador del Sporting explicarse de esa manera soez, barriobajera y maleducada. Y habrá niños que interpreten que esa es la manera correcta. Es una vergüenza. Tendría que pedir disculpas.
– Parece que para cubrir al Sporting hay que ser un forofo. Periodismo vs forofismo.
- Cuando yo llegué a esto, nadie era de un equipo. Todo empezó de cachondeo cuando De la Morena empezó a identificar a los que viajaban con los equipos con las camisetas. En Barcelona siempre había sido lamentable que todos eran del Barça y eso lo han exportado al resto. Cuando yo empecé a hacer deportes, en Madrid no había periodistas del Madrid y del Atleti. Es más, yo a veces hacía el Madrid y a veces hacía el Atleti. De la Morena intentaba identificarte, eso se ha cogido como una norma y todo el mundo se identifica. Allá ellos, yo no me identifico con nadie y tengo la virtud o el privilegio de poder pasármelo igual de bien viendo jugar al Atleti, al Barça y al Madrid. El que no pueda hacerlo, él se lo pierde.
– Si hay algo con lo que te identificas es con la música, las series y los libros. Recomiéndanos un disco, una serie y un libro.
- El último disco de Kings of Leon es buenísimo, han vuelto a hacer un disco parecido a los tres primeros: Walls de Kings of Leon es un pedazo de disco. Me gusta un grupo australiano que se llama DMA’s, es fantástico y suenan a Oasis de siempre. En series estoy viendo ahora «Cómo defender a un asesino». Brutal, me encanta. De las últimas que he visto es «Narcos», que me ha flipado, y estoy esperando a «Juego de Tronos» y «House of Cards». Y lo último que me he leído que me ha gustado mucho es «Cuentos cortos» de García Márquez. Impresionante. Ahora me estoy leyendo un libro de Enrique Vila-Matas, que estoy intentando meterle mano, es súper difícil, pero te aclara mucho la mente. Y me gustó mucho «La noche de los tiempos» de Antonio Muñoz Molina, un libraco sobre la guerra civil.
Y si entras AQUÍ podrás escuchar la entrevista íntegra a Jesús Gallego.
* Pulsando en los caracteres en cursiva puedes entrar en diversos enlaces de interés.
4 Comentarios
Pingback: «Me alegro mucho de que a veces triunfen los profesionales por encima de la marca o empresa» | Cronómetro Deportivo
Pingback: «No me gusta el periodismo que se hace actualmente en España» | Cronómetro Deportivo
Pingback: «Si no sales en los medios, no existes» | Cronómetro Deportivo
Pingback: «La radio no necesita de derechos para entretener, informar y acompañar» | Cronómetro Deportivo