Victoria del Atlético de Madrid por 0-2 ante el Málaga en la Rosaleda con goles de Koke y Filipe Luis en una gran demostración de pegada del equipo rojiblanco ante un débil Málaga defensivamente y con una producción escasa o insuficiente en ataque de forma que al termino del partido se vieron superados por un Atlético al que le bastaron dos zarpazos.
Primer tiempo sin un dominador claro, ninguno de los dos conjuntos consiguió imponer su juego, y pocas veces alguno de los dos conseguía bajar el balón al verde y dar cinco pases seguidos. Encuentro muy físico en el que predominaron los pelotazos arriba, disputas aéreas y numerosas imprecisiones a la hora de iniciar una jugada de ataque, este hecho aunque fue algo continúo fue estuvo principalmente presente durante el primer cuarto de hora. A partir de ahí ni es que mejorara el juego pero el Atlético sí que encadenó algunos pases seguidos, en jugadas aislados, la mayoría sin peligro, hasta que en el minuto 28, un inteligente Koke se la pasó a Torres que en la frontal, de espaldas a la portería, trató de hacerse un hueco entre dos centrales, no pudo, pero el balón quedó suelto para Koke que siguió la jugada a la perfección y ante Kameni no se puso para nada nervioso y lo batió ajustando el balón al palo. El Atlético sin hacer más merecimientos que la genialidad de Koke y Torres mandaba en el marcador ante un Málaga nervioso, al que se le notaba con ansiedad, más aún tras encajar el gol, cuando imprimieron mayor intensidad pero no mejor juego. En el minuto 43 llegó la primera ocasión local por medio de un remate de Keko con la espuela, sin problemas para Oblak.
El Málaga salió algo mejor en el segundo tiempo, al menos con algo más de control sobre el balón y acercándose más al área del Atlético pero sin incomodar a Oblak con ningún tipo de disparo, sí con centros de banda a banda que no encontraban rematador, o éste no estaba acertado. Una de las noticias del partido fue la vuelta de Recio tras tres meses alejado de los terrenos por una fractura en el radio de la mano derecha. El jugador malagueño salió a los sesenta minutos de juego para tratar de darle solidez y control al centro del campo blanquiazul. El Atlético hizo un partido muy serio atrás, sin apenas conceder ocasiones de peligro real al conjunto de Michel y muy pobre ofensivamente hasta que tuvo sus dos minutos de oro. A la media hora de la segunda mitad jugada en combinación del Atlético que concluyó con un disparo de Griezmann al lateral de la red. En la jugada siguiente, ésta por banda izquierda, asistencia de nuevo de Torres, para que Filipe en el mano a mano ante Kameni lo batiese con una suave vaselina sentenciando el partido. En los últimos compases del encuentro, con un Atletico más relajado el Málaga tuvo dos buenas llegadas, dos disparos lejanos de Rosales y Ricca respectivamente, que forzaron a Oblak a hacer dos buenas paradas.
Con este triunfo el Atlético se acuesta tercero con un punto más que el Sevilla que recibe en la mañana del domingo al Sporting. El Málaga que desde que se marchó Juande Ramos en diciembre solo ha ganado un partido tendrá una final el próximo miércoles en Gijón ante un Sporting que en caso de ganar les podría meter en problemas muy serios.