Gran partido el vivido esta noche en Riazor entre dos equipos establecidos en la zona noble de la clasificación. El Atlético llegaba con el objetivo de llevarse los tres puntos del feudo gallego y poder dormir líderes, pero no fue así.
Sorprendió una vez más en el once inicial Víctor Sánchez. Lopo al eje de la zaga con Sidnei, repitió Fede Cartabia en banda derecha, y primera titularidad para el argentino Jonás Gutierrez. Simeone por su parte salió con todo, defensa de gala, Koke caído a la banda izquierda, Carrasco a la derecha, y Griezmann y Jackson como hombres más adelantados.
El partido comenzó con claro dominio visitante. El balón se movía de un lado al otro y el conjunto gallego se dedicaba a seguirlo. Con el equipo muy junto y cediendo totalmente la iniciativa a los colchoneros. Demasiado agazapado estaba el Dépor, parecía obviar más si cabe, la diferencia evidente entre los dos conjuntos. El Atlético llevaba la manija pero con un juego un tanto inerte, sin profundizar y sin crear ocasiones. El jugador que más peligro generó fue el belga Carrasco, que se intercambió de banda con Koke para crearle problemas a Laure. Varias internadas por esa banda, hasta que en el minuto 34, un centro desde ese mismo costado, fue despejado por Sidnei, pero el rechace caería en los pies de Tiago, que de bolea fusiló a Lux. Se adelantaba en el marcador el conjunto del Cholo. Sin alardes, pero muy efectivo. Se crecieron con el gol los rojiblancos, de tal manera que pudieron sentenciar prácticamente el partido de no ser por la madera, que se encargó de desviar un cabezazo de Godín, y por si fuera poco, Lux atajó el rechace que sin querer remató Griezmann. No sería la última de la primera parte, ya que el propio ariete francés dispondría de un remate de cabeza al lateral de la red cuando se encontraba libre de marca. Finalizaba la primera parte con la sensación de que podía haber sido peor para el cuadro herculino.
La tónica de la segunda mitad fue totalmente inversa. El Atlético se encerró atrás, dejando correr el tiempo, y pensando ya en el partido de Champions en Kazajistán. Por su parte, el Dépor salió sin los miedos iniciales, y con la sensación por fin de que no tenían nada que perder. Destacó la aportación ofensiva de Fede y el dinamismo de Fayçal, que no se arrugó en ningún momento. Los locales achuchaban, pero el gol no llegaba, hasta que en el minuto 34, apareció el de siempre, el siete coruñés, Lucas Pérez tiró de pillería y le robó un balón sobre la línea de cal a Giménez para batir a Oblak tras un regate pisado. Una semana más, el Dépor era capaz de empatar un partido que comenzaba perdiendo. Riazor elevó decibelios y los coruñeses se lanzaron a por los colchoneros. El Cholo, que había realizado cambios defensivos en vistas de «guardar la ropa» tuvo que meter a Torres para intentar volver a adelantarse en el marcador. Cuando apenas restaban unos minutos para el final del choque, todo pudo cambiar con un lanzamiento de marroquí Fayçal Fajr, que estrelló un lanzamiento en la mismísima cruceta.
Sin tiempo para más, finalizó el partido. Sabor dulce para los gallegos que consiguieron un punto ante un rival de categoría aunque con la sensación de haber podido conseguir algo más de no ser por haber regalado los primeros 45 minutos. El Atlético puede alejarse de la cabeza de la tabla debido a este tropiezo y si ganan los equipos que le acompañan. Hicieron el gol y pensaron que estaba todo hecho.
Deportivo: Lux, Laure (Juanfran, min. 76), Lopo, Sidnei, Fernando Navarro, Pedro Mosquera, Celso Borges; Fede Cartabia, Fayçal Fajr, Jonás Gutiérrez (Luis Alberto, min. 69) y Lucas Pérez.
Atlético de Madrid: Oblak, Juanfran, Giménez, Godín, Filipe Luis, Tiago (Fernando Torres, min. 83), Gabi, Ferreira Carrasco (Correa, min. 61), Koke, Griezmann y Jackson Martínez (Saúl, min. 72).
Goles: 0-1 Tiago, min. 34. 1-1 Lucas Pérez, min. 77.
Árbitro: Pérez Montero. Amonestó con cartulina amarilla a Fayçal y Cartabia por el bando local.
Partido correspondiente a la décima jornada de la Liga BBVA, disputado en el Municipal de Riazor ante unos 25.000 espectadores.